El Ayuntamiento prevé aplicarlo a partir del 1 de noviembre
BARCELONA, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Plan de Usos del distrito de Ciutat Vella de Barcelona también podrá coto a los colmados, supermercados y autoservicios, algunos de los cuales dedican buena parte de su superficie a la venta de alcohol, una medida que a la práctica por ahora se aplicará en algunos ámbitos del Raval donde se concentran muchos de los establecimientos de este tipo.
Se trata de una de las novedades que ha presentado este miércoles en rueda de prensa tras la Comisión de Gobierno la concejal de Ciutat Vella, Assumpta Escarp, tras el periodo de alegaciones sobre el Plan Especial de Establecimientos de Concurrencia Pública, Hostelería y Otras Actividades --denominado Plan de Usos--. En total se presentaron 37 instancias con alegaciones.
La Comisión de Gobierno ha aprobado el plan, que si supera la Comisión de Urbanismo y el pleno de este mes, se aplicará a partir del 1 de noviembre en sustitución del de 2005 con el fin de "evitar la depravación del espacio público y que sea un espacio temático", ha dicho Escarp. También pone coto al consumo de kebabs y hamburguesas en la calle, la apertura de nuevos hoteles, los mueblés y pretende acabar con los pisos turísticos en los bloques de viviendas.
El plan, el último gran proyecto que presentó antes de dimitir la ex concejal del distrito, Itziar González, y que ahora está en la fase de negociación política, limitará la apertura de nuevos colmados donde se concentren demasiados, un hecho por ahora detectado en la zona de la calles Joaquim Costa, Nou de la Rambla y Unió, ha explicado la gerente de Ciutat Vella, Mercè Massa.
El Plan de Usos divide Ciutat Vella en 13 zonas en función de su densidad vecinal. El Gòtic sur y el Raval poniente y sur son las zonas de máxima protección vecinal, mientras que La Rambla, la calle Ferran, Portal de l'Àngel, la Catedral, la Ciutadella, el frente marítimo, el Puerto y en las principales vías habrá más tolerancia.
El Distrito incentivará el traslado de bares y otras actividades a las zonas de más tolerancia a cambio de permitirles más metros cuadrados y aforo. Además, en la zona del paseo Marítim permitirá que los establecimientos puedan cambiar indistintamente de pub a restaurante, aunque tras las alegaciones se limita para evitar "una explosión incontrolada", ha dicho Escarp.
PISOS TURÍSTICOS Y HOTELES
En relación a los pisos turísticos, los que tienen licencia --suman 616-- que no se trasladen a edificios exclusivamente para este uso --ahora hay 50-- podrán continuar operando donde estén ubicados hasta la entrada en vigor de la nueva ordenanza municipal que el Ayuntamiento elaborará una vez se apruebe el Decreto de la Generalitat que fijará las sanciones cuando generen molestias.
El Ayuntamiento también apostará porque los hoteles se muevan, aunque no podrán crecer en número de camas, que ahora se sitúan por encima de las 13.000 en más de 160 hoteles y pensiones, ha dicho Massa. Tras el periodo de alegaciones se establece que el 55% de superficie a donde se traslade el hotel se pueda destinar a habitaciones, cuando antes era el 50%.
La comisión también ha aprobado destinar parte del antiguo recinto industrial de la Philips a un nuevo centro de creación de danza, dedicar la fábrica Oliva Artés a la nueva sede del Museu d'Història de Barcelona (Muhba) centrada en la Barcelona contemporánea, la ampliación de La Violeta de Gràcia y una guardería en los números 243-271 de la calle Perú.
