Rosell propone al Estado medidas "economicistas" como el copago para afrontar el incremento del gasto social

BARCELONA 27 Nov. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la patronal catalana Fomento del Trabajo, Joan Rosell, advirtió hoy de que el Estado deberá diseñar unas nuevas "reglas del juego", "más economicistas", para afrontar el incremento del gasto social que conllevará el incremento poblacional derivado de la demografía y de la mayor esperanza de vida de los ciudadanos.

Para Rosell, las medidas de futuro pasan por abandonar la actual política de "decir a todo que sí" y optar por nuevas fórmulas en ámbitos como la educación o la sanidad que ayuden a "economizar el gasto" tales como "el copago, el bono escolar o exigir rendimiento a los alumnos a cambio de subvenciones".

Estas medidas son aún más importantes, según el responsable de la patronal, porque el Gobierno tendrá "difícil" mantener de ahora en adelante los niveles "espectaculares" de recaudación por impuestos que ha registrado los últimos años, con un superávit que ha alcanzado incluso "los 12.000 millones de euros".

Por otro lado, Rosell criticó que España sea "el país que más paga de Seguridad Social" y, a pesar de que se mostró de acuerdo con que "todos paguemos" para tener un país "como Dios manda", señaló que el superávit que acumula la Seguridad Social debería tenerse en cuenta para "bajar la cuota de contribución que se paga".

NO HABRÁ "GRAN CRISIS" INMOBILIARIA EN 2008.

En cuanto a las previsiones económicas para 2008, el presidente de Fomento del Trabajo declinó la posibilidad de que haya una "gran crisis inmobiliaria" que afecte a muchas empresas, puesto que declaró que las constructoras "tradicionales" aprendieron de la crisis que sacudió el mercado a principios de los 90.

A quien sí podrá afectar el descenso en la construcción residencial es a nuevas empresas que se dedicaban a otras actividades y optaron por el lema "todos somos promotores" al ver la evolución del sector. "Algunos pensaron que dos y dos eran cinco y los bancos apuntan a que por aquí pueden venir los problemas", manifestó Rosell.

Asimismo, el responsable de la organización empresarial recordó que la ralentización del sector en cuanto a obra residencial se verá compensada con "muchísima" obra pública programada que "hará aumentar el consumo de cemento".

En el marco de una conferencia pronunciada en la apertura del Curso Gremial del Gremio de Industrias de la Confección de Barcelona, Rosell apuntó como dato negativo la inflación "disparada" que se ha registrado los últimos meses. "Esperamos que se modere pero los resultados de noviembre serán negativos y en diciembre también aunque en menor grado", aseguró.

No obstante, el presidente de la patronal transmitió un mensaje "optimista" de cara al próximo año. "No hay ninguna luz roja de alarma y la situación no es tan negra como algunos la pintan", aseguró, y añadió que el crecimiento previsto del 2,5% en 2008 "ya lo firmaría para los próximos años".