El paso del tiempo en las Royals: porque ellas también evolucionan

Actualizado: viernes, 2 octubre 2015 10:20

   MADRID, 2 (CHANCE)

   Por todos pasa el tiempo. Cada cumpleaños que celebramos significa que hemos sumado ya a nuestra edad uno más. Y esto se ve reflejado no solo en nuestro DNI sino también en el rostro y en definitiva, todo nuestro físico se ve resentido con el paso del tiempo.

   Un paso que afecta a todos los mortales, incluidas a las reinas y princesas de las monarquías más importantes del mundo. Sí, Doña Letizia no es la misma que era antes. Máxima de Holanda no refinó su cuidado vestuario de la noche a la mañana o en el caso de que se hagan algún que otro retoque, si es el caso de Rania de Jordania, todo es por la edad. Hasta Kate Middleton para presumir de su cuidado estilo no se obró un milagro para dar con la clave exacta y arrasar en medio mundo.

   Efectivamente, las royals también envejecen, son como cualquier persona de a pie a diferencia del trato nobiliario. Desde que comenzaron a entrar en la realeza, cada una de ellas ha aprendido a ser muy cuidadosas, a tratar con gente de otro nivel y también a defender e involucrarse en nuevas causas que sin duda no esperaban.

NUESTRA REINA LETIZIA, EL EJEMPLO DEL ENVEJECIMIENTO EN NUESTRA REALEZA

   Por ejemplo, nuestra Reina Letizia aparte de ir probando vestuario y diferentes peinados, no fue hasta este propio 2015 cuando Doña Letizia nos sorprendía a todos con un corte de pelo y un cambio de look que fue de lo más visto aquellos días.

   Fiel a Felipe Varela, la Reina ha ido innovando en cuanto a su estilo, siempre mirado con lupa. En cuanto a su físico, es imposible no fijarse en que ha ido perdiendo algo de peso pero que también ha ido mantenido en su línea, y también, la edad hace ya mella, aunque también demuestra la sabiduría y el aprendizaje como bien decimos de nuestra Doña Letizia hasta convertirse en Reina de España.

EL ESTILO DE MÁXIMA NO SE HIZO EN DOS DÍAS

   Si pensábamos que el estilo de Máxima de Holanda fue siempre muy ostentoso, elegante y sorprendente, nos equivocábamos. La también convertida en reina de los Países Bajos, no siempre nos deslumbraba con sus elecciones en cuanto a qué look calzarnos. Eso sí, lo que parece que no ha cambiado son sus sombreros, pamelas y tocados, pues nos remontamos por ejemplo al año 2002, en el Día del Rey, Máxima Zorreguieta ya apuntaba maneras.

   El peso siempre es una cuestión que llama mucho la atención. Bien es cierto que Máxima siempre ha sido una mujer de armas tomar pero sería recientemente y con su descubierta dieta, donde Máxima ha perdido algún que otro kilo de más. En cuanto al rostro, pues como todo, la edad hace mella pero a diferencia de alguna que otra royal, lo lleva con resignación y sin duda, con su inconfundible sonrisa.

MÓNACO, EL LUGAR DE LAS PRINCESAS... QUE LO SERÁN ETERNAMENTE

   Siguiendo con la realeza europea, es destacable el cambio de Charlène de Mónaco. Siempre con su pelo corto, no podemos dejar de prestar atención a una instantánea fechada del 2006, vislumbramos aún el cuerpo de nadadora.

   Y es que antes de convertirse en la esposa de Alberto II de Mónaco, Charlène por ejemplo fue miembro del equipo de natación de relevos de 4x100m estilos de Sudáfrica en los Juegos Olímpicos de 2000 celebrados en Sídney. De ahí que aún luciese su figura de nadadora que ha ido refinando con el tiempo.

   Y es que teniendo a unas cuñadas como Carolina y Estefanía de Mónaco, la cuales también han pasado por grandes cambios tanto en su vida, con diversos hombres que han plagado sus capítulos amorosos, como físicos. Grace Kelly era mucha Grace, y el principado monegasco se ha convertido en santo y seña de la elegancia, la sofisticación y glamour. Eso sí, es innegable que ambas han envejecido con elegancia. No hay más que ver por ejemplo a Carolina, embobada con su nieto Sacha, vimos ya a la primogénita de los Grimaldi en su nueva faceta como abuela.

   De la 'princesa rebelde', qué decir también, que ha ido aceptando su edad y envejecer con más elegancia que cuando era joven. Atrás queda aquella jovenzuela que intentó ser cantante.

KATE MIDDLETON REFINÓ SU FONDO DE ARMARIO SIENDO LA DUQUESA DE CAMBRIDGE

   ¿Quién le diría a la joven Kate Middleton que se convertiría en parte de la realeza británica? Y aún apostamos por más, que sería un referente en la moda de las royals. Desde que conoció al príncipe William, su vida dio un giro de 360 grados y su estilismo también. Ella cautivó a Guillermo con un vestido lencero negro transparente que dejaba ver su ropa interior en un desfile de donde ambos estudiaban, pero menos mal que se quedó en una prenda icónica del momento y que no es referente de nada. Sin embargo, Catherine Middleton ha logrado conquistar a la sociedad británica con su simpatía, su arma debajo del brazo.

   Y sabiendo el potencial de la duquesa de Cambridge, lo ha explotado en un estilo único y digno de analizar. De su figura, qué decir, que tras dos embarazos, cualquiera lo diría pero también ha descubierto entre los cambios de su vida, ese instinto maternal que demuestra con los dos niños de sus ojos.

   De la que apenas hemos visto cambios y si un envejecimiento muy elegante es Camilla Parker Bowles. La duquesa de Cornualles ha mantenido el tipo y fiel a su estilo, muy inglés eso sí, la actual esposa del príncipe Carlos sigue casi igual que siempre.

EL GRAN CAMBIO DE SOFÍA HELLQVIST Y OTRAS PRINCESAS NÓRDICAS

   Más ejemplos de cambios entre las familias reales los encontramos en los países nórdicos. Sin duda, la historia de Sofía Hellqvist es de esas que bien podríamos encontrarlos en los cuentos de hadas. De modelo de lencería y con unas sugerentes fotografías que enseñaban más de la cuenta, el cambio de Sofía ha sido como quitarse ese San Benito de encima para integrarse al cien por cien en la realeza sueca.

   A pesar de su pasado y de la negativa de toda la familia de Carlos Felipe de Suecia, concretamente de sus hermanas Victoria y Magdalena, Sofía fue conquistando el corazón de todos y refinando su vestuario, de pasar de modelo de ropa interior a royal, es uno de los grandes cambios -no tanto físico- pero sí de carácter por el hombre al que ama y confió en ella.

   Mirando en los países nórdicos, la princesa Mette-Marit de Noruega al igual que le ha ocurrido a la princesa Estefanía, ha sido una de las que ha aceptado la edad con los años y sin duda ha envejecido muy elegantemente.

    En cuanto a otra de las 'royals del norte', Mary de Dinamarca, su transformación ha sido notable a lo largo de los años. Desde su look más desenfadado y casual en 2003 cuando aún solo era la novia del príncipe heredero a su estilo actual, fresco y acertado que la ha convertido en una de las princesas más elegantes. 

RANIA DE JORDANIA, ¿TE HAS RETOCADO ÚLTIMAMENTE?

   Y finalmente hacemos un repaso a las royals destacando a Rania de Jordania, que ha dado mucho de qué hablar últimamente en su aparición en Nueva York. Su rostro, ligeramente cambiado, ha hecho que todo el mundo especule sobre si Rania se ha hecho un retoquito. Es cierto que desde que la esposa del rey Abdalá II fuese esa chica de la que se enamoró, los años no pasan en balde y al igual que les ha pasado a todas, el tiempo hace mella.

   ¿Qué haya querido tirar del bótox? No lo descartamos pues cada uno está en su derecho. Finalmente, con su turbante inmutable, Mozah bint Nasser al-Missned más conocida como la 'Jequesa de Catar' una de las tres esposas del emir del estado de Catar, Hamad bin Jalifa Al Thani, su figura apenas ha cambiado.

   Un repaso a cómo las royals desde que comenzaron su 'reinado' hasta ahora han cambiado. La edad pasa por todas, la experiencia, el aprendizaje de estar en la realeza y saber el protocolo y qué look usar en cada ocasión, las han convertido en lo que son en la actualidad.

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