El Arzobispo de Valencia convoca el rezo del Rosario el 1 de mayo por el fin de la pandemia de coronavirus

Imagen de archivo del Cardenal Cañizares
Imagen de archivo del Cardenal Cañizares - V. GUTIERREZ/AVAN - Archivo
Publicado: miércoles, 29 abril 2020 12:57

   VALNCIA, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -

   El Arzobispo de Valencia, cardenal Antonio Cañizares, ha pedido a la Archidiócesis de Valencia que el 1 de mayo, a las 19.00 horas, "en todas las casas recemos el santo Rosario, y así se elevará un clamor hasta el cielo que llegue a nuestra Madre, la Virgen María, por la liberación universal y final de la pandemia del Covid-19".

   Según ha informado el Arzobispado en un comunicado, el cardenal Cañizares ha dirigido palabras "de aliento" a las familias que han sufrido la enfermedad o la muerte por la pandemia, a las que ha asegurado: "Hago mío vuestro dolor por las personas tan queridas, a las que ni siquiera en la mayoría de los casos, habéis podido acompañar ni despedir. Nada hay con más fuerza de futuro que esta fe, ahí está nuestra esperanza, más aún en esta situación tan difícil".

   Además, ha señalado que "vamos a entrar en el mes de mayo, Mes de María, en que celebraremos la fiesta de nuestra Señora de los Desamparados, aunque de manera distinta a años anteriores".

   "También conmemoraremos las apariciones de la Santísima Virgen de Fátima, que tantas bendiciones y enseñanzas ha traído para la Iglesia y el mundo entero, mes de las flores a María, que es nuestra esperanza y nuestra Madre del Cielo que nos ama, por ello, rezaremos juntos el santo Rosario. Aunque estéis solos rezadlo, los demás cristianos os acompañamos", ha asegurado.

   El Arzobispo ha exhortado a "permanecer firmes en la caridad, conservando la unidad, con el vínculo de la paz, que nos da Cristo y brota del amor, acompañado de la esperanza y de la fe en sus obras".

   Por otra parte, el cardenal Cañizares anuncia que ya está preparado el "instrumento de trabajo" del Sínodo Diocesano. Las conclusiones habrán de expresar "que por encima de todo está Dios presente en su Iglesia; Él ha de ser objetivo primero en la Iglesia diocesana, para llevar el Evangelio al corazón del mundo, transformándolo desde dentro con la fuerza del Evangelio".

Leer más acerca de: