Cultura.-El Cristo del Salvador volverá a su iglesia el jueves con su color original tras una restauración de seis meses

La imagen del Cristo de Salvador, una de las advocaciones más antiguas de la Comunitat Valenciana cuyo origen se remonta al año 1250, volverá a su emplazamiento en la Real Iglesia de San Salvador de Valencia el próximo jueves, 8 de noviembre, después de haber sido sometida a un proceso de restauración que ha durado seis meses y que ha permitido "redescubrir la escultura, obtener un conocimiento exhaustivo de sus materiales e historia y devolverle su color y aspecto original", según explicó hoy la directora del Institut Valencià de Conservació i Restauración de Béns Culturals (Ivacor), Carmen Pérez.

La responsable del instituto de restauración presentó esta mañana en la sede de Valencia del Ivacor la recuperación de la pieza, que fue rescatada de una hoguera durante la Guerra Civil, en la que han trabajado durante el último medio año cuatro técnicos del organismo y que ha contado con un presupuesto de entre 30.000 y 40.000 euros. Un TAC, una completa serie de radiografías --que ha servido para descartar que el Cristo escondiera una reliquia en su interior--, la eliminación de planchas metálicas añadidas que estaban perjudicando a la madera, la reintegración de diversas pérdidas en a superficie y una cuidada limpieza son algunos de los pasos que ha seguido la actuación.

La devolución de la obra al templo se llevará a cabo el jueves desde las ocho de la mañana, ya que se trata de una operación "complicada" debido al peso de la figura, subrayó Carmen Pérez. De esta manera, los fieles de la parroquia podrán venerar al Cristo del Salvador el viernes día 9, justo cuando se celebra su festividad. Para esta ocasión, se han recuperado un conjunto de gozos de finales del siglo XVII y principios del XVIII cantados en valenciano que narran algunas de las catástrofes padecidas por la ciudad, como riadas e inundaciones. Estas composiciones serán interpretadas por Lo Rat Penat.

La director del Ivacor resaltó la "enorme importancia" del Cristo del Salvador tanto "artística e histórica como sentimental". En este sentido, recordó que, según la tradición, éste es el primer Cristo que llegó a Valencia después de la Conquista. La leyenda mantiene que la obra, que habría venido con el Rey Jaime I, fue rescatada de las crecidas de las aguas del río Turia entre los puentes de la Trinidad y Serranos.

La catedrática llamó además la atención sobre el hecho de que "hay muy pocos Cristos de un tamaño como el del Salvador" y agregó que en la Comunitat Valenciana no hay otra figura de esta etapa de transición tardorrománica de una relevancia similar. A esto hay que sumarle un valor "de culto", puesto que es un Cristo que cuenta con "muchísima devoción, ya que es al que la ciudad de Valencia siempre se ha acogido en grandes catástrofes", añadió.

En la restauración llevada a cabo por el Ivacor destaca el redescubrimiento de los colores reales de la figura, que habían sido tapados por seis intervenciones diferentes. Algunas de ellas se han conseguido fechar gracias al hallazgo de materiales como blanco de zinc, que comenzó a emplearse a partir de 1750, o, incluso, servilletas del papel utilizadas para rellenar las juntas de los brazos, lo que no pudo hacerse antes de los años 60.

GRAN REALISMO. El resultado de este trabajo es un aspecto completamente renovado del Cristo, al que se ha conseguido eliminar las capas superpuestas hasta sacar a luz su color primitivo, una tonalidad amarillenta mortecina, ya que la figura está esculpida un gran realismo.

Prueba de ello es la sangre que brota del rostro y las extremidades del Cristo --antes de la restauración prácticamente oculta--, de vivo color rojo y que en algunos lugares contiene incluso trozos de cera para simular coágulos, señaló Carmen Pérez.