Las 'Experiencias con un desconocido' de Sònia Gómez agotan en 48 horas las entradas en el Festival VEO

Actualizado: miércoles, 10 febrero 2010 12:37

VALENCIA, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -

La performer y bailarina catalana Sònia Gómez visitará la Sala Zircó de Valencia mañana y el próximo viernes dentro de la programación del Festival València Escena Oberta (VEO) con su espectáculo 'Experiencias con un desconocido'. La obra, a medio camino entre el teatro, la televisión y la danza, ha generado gran expectación entre el público valenciano, que agotó las entradas en 48 horas, informaron hoy los responsables del certamen en un comunicado.

'34 añitos. Morena caucásica. Performer sin pudor. Servicio a desconocidos' fue el enunciado, insertado en la sección de anuncios por palabras de la prensa de Barcelona, que arrancó el proceso de creación de la pieza con la que Sònia Gómez actúa en el Festival VEO.

El encuentro con los varones interesados articula una pieza que se inspira en el arte conceptual de Sophie Calle y las piezas distinguidas de La Ribot, explicaron las mismas fuentes.

El proyecto oferta siete performances personalizadas, consistentes en compartir experiencias lúdicas, poéticas, sensuales o intelectuales con la intérprete. Después de acordar los términos de la experiencia en un contrato, los clientes protagonizan divertidas y audaces misiones diseñadas por Sònia a partir de la información personal recogida durante el proceso previo de seducción-investigación-creación.

Superada la esfera privada, en la que los desconocidos se descubren a sí mismos como improvisados performers y hacen realidad sus caprichos más inconfesables, Sònia escenifica las experiencias como si se tratara de un programa piloto de televisión.

La bailarina y performer catalana es una de las artistas de la escena contemporánea con mayor proyección internacional. En su currículum figuran colaboraciones con La Fura dels Baus y La Carnicería Teatro, pero su cantera fue la desaparecida General Elèctrica, centro de creación que promovía "la contaminación y promiscuidad artísticas entre las diferentes disciplinas de las artes escénicas".

Tras la disolución del colectivo, Sònia se decantó por una trayectoria entre el happening y la acción artística cuya materia prima es su propia vida.

"El trabajo autobiográfico me permite conocerme. No obstante, explicar la vida de alguien sobre un escenario de manera llana no resulta interesante, así que me gusta que el público no sepa qué es y qué no real, que se quede en esa línea fina. Normalmente casi todo lo es, pero lo maquillas, lo exageras, lo construyes, porque lo haces escénico", argumenta.

En su visita al Festival VEO, la performer escenifica la curiosidad que profesa por el universo masculino. Entre los siete ejercicios artísticos que trae a Valencia ha escogido a un desconocido local. "Este proyecto es un laboratorio emocional, somático y gestual sobre las tablas para ofrecer un artilugio deconstructivista donde lo cotidiano adquiere estatus de milagro, delirante y marciano", define.