VALENCIA, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del Consell, Paula Sánchez de León, señaló hoy de que la Generalitat solicita a la Comisión de Explotación del Trasvase la transferencia de 69 hm3 desde el Tajo al Segura para el primer trimestre del año hidrológico, 22,5 para abastecimiento y el resto, 64,5, para regadíos, .
Sánchez de León, en la rueda de prensa posterior al pleno del Consell, explicó esta solicitud se realiza conforme a las conclusiones de un informe de necesidades hídricas presentadas hoy por el conseller de Medio Ambiente, Agua, Vivienda y Urbanismo, Juan Cotino.
La Comisión de Explotación se reunirá el próximo martes, 3 de noviembre, para aprobar una propuesta definitiva del volumen de agua a trasvasar y trasladarla al Consejo de Ministros para su aprobación.
Para el Consell, esta cantidad es "inferior a las necesidades de los usuarios del Segura, pero la Comunitat Valenciana es consciente de que los usuarios del Tajo tienen prioridad sobre el agua de la cuenca, por lo que solicita 69 hm3 de los excedentes", señaló.
De esta forma, Sánchez de León, afirmó que el Consell "respeta y cumple" la norma de explotación, ya que "garantiza la prioridad de los usuarios de la cuenca del Tajo y sus demandas ya que se trata de trasvase de aguas excedentarias".
Sánchez de León aseguró que este volumen de 69 hm3, "establecido objetivamente con criterios técnicos" debería ser la cantidad aprobada por el Consejo de Ministros, porque un volumen inferior al mismo "carece de justificación".
Asimismo, la consellera apuntó que ha hecho llegar al Gobierno un estudio elaborado por la Universidad de Alicante, en el que se pone de manifiesto "la importancia del trasvase Tajo Segura para las zonas beneficiarias, en concreto, para la provincia de Alicante y los efectos que tendría una reducción de los caudales trasvasados".
ESTUDIO
Según trasladó la consellera, el estudio señala que las transferencias del Tajo al Segura son una "pieza básica e indispensable" para el abastecimiento de agua a las poblaciones del sureste español, muchas de las cuales no disponen de otras fuentes de suministro o son muy costosas.
De hecho, el Tajo-Segura suministra el 25% del total de agua distribuida para el abastecimiento en la provincia de Alicante. Además, de este trasvase dependen 12.558 hectáreas de nuevos regadíos y son redotadas otras 28.300 hectáreas en la provincia de Alicante.
Los 125 hm3 que podrían llegar desde la cabecera del Tajo a las zonas regables de la comarca meridional alicantina, "que nunca han llegado, no cubren las necesidades totales, por lo que se ha generado históricamente un déficit hídrico, que es el que debería haber sido cubierto por el trasvase del Ebro".
Sin embargo, según se recoge en el informe presentado por el conseller de Medio Ambiente y Agua, desde el año hidrológico 1978/79 en que se realizó la primera transferencia, sólo se ha autorizado un 49% del caudal esperado por los regantes.
Asimismo, asegura que gracias al Trasvase Tajo-Segura se mantiene el 62% del regadío de la provincia de Alicante, un regadío "altamente tecnificado y muy productivo", que utiliza mucha mano de obra, algo esencial en estos momentos de crisis, con una clara orientación hacia el mercado internacional, donde resulta competitivo y eso que, prácticamente, no cuenta con ayudas europeas.
Según el informe refrendado por el Consell, la conducción Tajo-Segura no sólo está destinada a esta cuenca, sino que también da un servicio básico a la cuenca del Almanzora en Almería y a la cuenca del Guadiana, permitiendo el abastecimiento de las poblaciones castellano manchegas por las que pasa, en esta cuenca y en algunas del Júcar, y se utiliza para la sustitución de regadíos en los Llanos de Albacete.
La Ley permite el envío de hasta 50 hm3 del Tajo al Guadiana, para abastecimientos y para el mantenimiento de un espacio natural tan importante como Las Tablas de Daimiel, aunque, lamentablemente, este último objetivo no se cumple, ya que los caudales derivados se pierden, o son sustraídos por el camino, como ha sucedido en el último trasvase, en el que sólo llegó a las Tablas un 3'8% del caudal derivado.
Del mismo modo, destaca que el mantenimiento del trasvase no sólo reporta beneficios a las cuencas receptoras, sino también a las cuencas cedentes y de tránsito, que perciben compensaciones económicas.
Los estudios presentados por la Confederación Hidrográfica del Tajo demuestran que, aún en el peor escenario de lluvias supuesto, con estas transferencias, la situación de los embalses de cabecera del Tajo a 1 de enero del próximo año "sería mejor que la del año anterior", a pesar de que entonces fueron menores las transferencias, lo que demuestra que queda totalmente garantizado el respeto a la cuenca cedente.
