Juzgan a un acusado de matar a un joven italiano en El Carmen de Valencia que le recriminó que tocara a su novia

Actualizado: jueves, 18 mayo 2006 18:28

VALENCIA, 18 May. (EUROPA PRESS) -

Un tribunal popular comenzó a juzgar hoy a Mohamed A.A., un ceutí de 39 años, acusado de matar a puñaladas en la madrugada del 13 de agosto del pasado año a un joven italiano de 20 años que le recriminó que hubiera tocado a su novia, una chica americana con la que estaba pasando unos días de vacaciones en Valencia. Los hechos sucedieron en la zona del barrio de El Carmen, donde la pareja había ido a dar un paseo.

El fiscal reclama provisionalmente 17 años y medio de prisión para el acusado por un delito de asesinato mientras que la acusación particular pide 20. La defensa de Mohamed, que estuvo a punto de mostrar su conformidad con los hechos en el inicio de la vista, no precisó los años que reclama para su cliente por unos hechos que califica de homicidio con la atenuante de drogodependencia.

El acusado reconoció durante la primera sesión del juicio que apuñaló a la víctima pero aseguró que no tenía intención de matar. Explicó que llevaba encima un cuchillo porque había ido a la plaza del Tossal a buscar a unos ciudadanos sudamericanos con los que se había peleado tres días antes.

En esa jornada, según dijo, había consumido tres tranquilizantes y cerveza durante todo el día. Reconoció que pretendió tocar los glúteos a la joven americana y como su novio le atacó, declaró, él se defendió. Mohamed aseguró que consume droga desde los 17 años y añadió que en el momento de los hechos llevaba un mes viviendo en el barrio de El Carmen, al que había llegado desde Lleida.

En esta primera sesión del juicio también declaró la novia de la víctima, que se echó a llorar cuando recordó el momento de la agresión. La joven explicó que había llegado a la ciudad de vacaciones el 5 de agosto y esa noche se habían desplazado hasta el barrio de El Carmen para pasear y buscar un sitio donde "tomarse algo". Aseguró que el acusado se dirigió, por dos veces, en su dirección a pesar de que se desplazaron y su novio le recriminó su acción.

En ese primer momento, iniciaron una pelea y un forcejeo aunque les separaron y siguieron su camino. Sin embargo, ella se percató de que su pareja estaba "mareado" y vio que tenía una mancha de sangre en el pecho y el rostro "apalizado". Fue entonces cuando se dio cuenta de que tenía un corte en el pecho y que el acusado aún estaba en el lugar y les miraba. Acto seguido, regresó hasta donde se encontraban, esta vez con la navaja a la vista, y agredió a su novio que, lo único que podía hacer, era "esquivar el cuchillo".

El joven italiano intentó refugiarse en un bar y hasta allí le siguió el acusado, relató la testigo, que afirmó que cuando se decidió a entrar, ya le vio gravemente herido y sangrando abundantemente. La chica aseguró que en ningún momento vio a su pareja pegar al otro y afirmó que no tuvo posibilidad de defenderse porque todo transcurrió "rápido y a corta distancia".

Preguntada por el aspecto del acusado, indicó que le vio "normal" y "perfectamente ágil" y afirmó que cuando se cruzaron con él la primera vez, no vieron que llevaba el cuchillo sino únicamente algo que parecía un trapo o una tela.

Según sostiene el fiscal en su relato provisional de hechos, el acusado, condenado anteriormente por tráfico de drogas y lesiones, había cogido esa misma noche el cuchillo con el que cometió el crimen, de los usados para trinchar carne, de un bar aprovechando un "descuido" de los camareros. El representante del ministerio público sostiene que la víctima sí que llegó a dar, en el primer forcejeo, un puñetazo al acusado, lo que provocó que éste, cuando se alejaron tras haber sido separados, se dirigiera hacia el joven italiano y le apuñalara varias veces, una de ellas en el corazón.