VALENCIA 28 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Conselleria de Sanidad ha realizado durante 2009 un total de 53.127 pruebas para detectar posibles anomalías congénitas en recién nacidos, que se enmarcan dentro del programa de prevención de metabolopatías de este departamento, que ha alcanzado una cobertura del 99,5% de los bebés en la Comunitat Valenciana.
Del total de muestras analizadas se han detectado 26 casos de hipotiroidismo congénitos, lo que supone una incidencia de un caso por cada 2.045 recién nacidos, así como ocho casos de hiperfenilalaninemia, lo que representa una incidencia de un caso por cada 6.645 bebés, según ha informado la Generalitat en un comunicado.
El conseller de Sanitat, Manuel Cervera, ha afirmado que la salud infantil es "un indicador de gran significación para la salud pública de cualquier país, ya que se considera una expresión directa del entorno socioeconómico, de la nutrición, de la educación y de los cuidados de salud que reciben los niños".
Este programa de prevención de metabolopatías tiene el objetivo de evitar el retraso psicomotor en niños afectos de dos enfermedades congénitas: el hipotiroidismo y la fenilcetonuria. Según la Generalitat, en la actualidad este programa de prevención de metabolopatías es "ampliamente conocido y aceptado por la población". Así, desde el 1995 la cobertura de este programa se ha mantenido por encima del 95% de los recién nacidos y en la actualidad está en el 99,5%.
El hipotiroidismo congénito es un trastorno hormonal. En muchas ocasiones, ninguna manifestación delata en estos niños su problema hasta que no pasan varios meses de vida. Entonces ya se han producido en el bebé lesiones irreversibles, como el retraso mental. Sin embargo, el hipotiroidismo se puede detectar en las primeras semanas de vida, a través de un sencillo análisis, lo que permite tratar al niño con hormona tiroidea, de modo que se desarrolle con absoluta normalidad, sin ninguna deficiencia.
Por su parte, la fenilcetonuria y otras hiperfenilalaninemias son errores innatos del metabolismo de los aminoácidos. Al igual que en el caso anterior, si estas enfermedades no se tratan en los primeros meses de vida se puede desarrollar un retraso mental grave e irreversible. Ante esta situación la enfermedad se puede detectar mediante una prueba sencilla en los primeros días de vida del niño, lo que permite instaurar un tratamiento dietético precozmente, que evitará la aparición de deficiencias y permitirá al bebé llevar una vida normal.