La Rambla de Barcelona muestra su renovado mosaico de Joan Miró

Actualizado: lunes, 19 marzo 2007 23:13


BARCELONA, 19 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Rambla de Barcelona ya muestra su renovado mosaico de Joan Miró, tras haber afrontado un proceso de restauración. La rehabilitación del mosaico Pla de l'Ós, situado en el pavimento central de la Rambla, frente el Gran Teatre del Liceu, se inició hace un mes.

El segundo teniente de alcalde y presidente del Instituto de Paisaje Urbano, Jordi Portabella, inauguró hoy la rehabilitación del mosaico, que se instaló el 30 de diciembre de 1976 en la Rambla, a propuesta del propio Joan Miró, quien nació en el cercano pasaje del Crèdit.

Sin embargo, el paso del tiempo y el hecho de que esté ubicado en una vía tan emblemática como la Rambla, por donde pasan millones de personas cada año, ha provocado el deterioro y la pérdida de los colores originales, lo que, hace un mes, obligó a iniciar su restauración.

Esta recuperación es una de las más importantes que ha afrontado el Instituto de Paisaje Urbano del Ayuntamiento de Barcelona en el distrito de Ciutat Vella. El fondo económico para realizar estas obras, cerca de 32.000 euros, procede de las compensaciones derivadas de la autorización de lonas publicitarias en los andamios.

Las obras de restauración han consistido en la sustitución de las piezas de color del mosaico, las más degradadas y erosionadas, por otras nuevas que son idénticas a las originales, mientras que las de color negro y blanco se han mantenido. Las piezas se han fabricado de la misma manera que se hizo en la década de los 70 por encargo de Miró.

Portabella aseguró que el Instituto de Paisaje Urbano empezó hace dos años a estudiar la posibilidad de restaurar el mosaico, ante la pérdida de brillantez de sus piezas. "Miramos cómo podíamos reproducir las singularidades y las curiosidades que Miró había puesto", señaló.

Una de estas singularidades es que el pavimento, que parecía que estuviese alineado y que tenía un mismo color, "no lo estaba", por lo que desde el Insituto de Paisaje Urbano se "empezó a documentar la técnica para decidir quién podría llevar a cabo esta restauración y su colocación en el siglo XXI", proceso que les llevó medio año.

El mosaico del Pla de l'Ós muestra un gran círculo, símbolo universal de la totalidad y también de la perfección. La voluntad de Miró es que esta obra de arte, situada en el pavimento, no estuviera protegida y que cumpliera la misión de ser pisada por los ciudadanos que paseaban por la Rambla.

La instalación de este mosaico no quedó exento de polémica, ya que el propio Miró, cuando por primera vez lo visitó, se encontró con un albañil que se quejó de que las baldosas estaban mal colocadas. El artista le contestó que le había costado un gran esfuerzo convencer a los operarios para que pusieran las piezas de forma irregular.