El Teatro Real "se pone a prueba" con 'Ariadna en Naxos' de Strauss

Actualizado: lunes, 25 septiembre 2006 18:00


MADRID, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Teatro Real "se pondrá a prueba" con 'Ariadna en Naxos', de Richard Strauss, una obra que nunca antes se había estrenado en este escenario y con la que iniciará su décima temporada operística el próximo 27 de septiembre. Así lo aseguró hoy el director artístico del coliseo madrileño, Antonio Moral, para quien esta ópera es "especial, un título que no es de gran formato pero que sin duda constituye una de las grandes obras maestras del primer tercio del siglo XX", afirmó.

Moral destacó la presencia de 17 solistas "excepcionales" y aludió a la necesidad de que el reparto sea "equilibrado" desde el punto de vista vocal y escénico a la par que "creíble". Estas son las grandes dificultades de esta ópera en un acto con prólogo de Richard Strauss y libreto de Hugo von Hofmannsthal "que aúna, y debe dar el punto justo, a Molière con el mito griego y reflexiona sobre el amor y el arte", agregó.

Jesús López Cobos, director musical del Teatro Real asume esta partitura que hoy calificó de "espectáculo total" y en la que 37 músicos solistas deben realizar un alarde de interpretación. Para el director de orquesta, Strauss dejó en esta obra su "huella de gran maestro" y logró que el final de esta ópera sonase como si hubiese 80 músicos en el foso.

Para el maestro López Cobos "homogeneidad" es la palabra que mejor define los repartos implicados en esta producción que ha contado con dirección escénica de Christof Loy y escenografía y vestuario de Herbert Murauer.

Este ópera le ha servido a la Orquesta Sinfónica de Madrid, responsable de esta partitura, "como si trabajara ocho Verdis", reconoció López Cobos agregando que lo más genial es el prólogo, "una obra de teatro actualizada", apostilló Moral.

EN DOS NIVELES

Justin Way, realizador de dirección de escena, resaltó la escenografía en dos niveles (al modo de la famosa serie británica 'Arriba y abajo') ideada para este montaje en el que se cuenta la trastienda del mundo de la ópera, "con lo mejor y lo peor de cada uno", dijo recordando que el prólogo y la ópera se han tratado como dos funciones distintas.

"Es una ópera sobre nosotros, cómo trabajamos, nuestros problemas. En el prólogo está tanto el arte de la ópera como los actores y también el asunto del dinero, ya se sabe que el que paga manda", añadió Murauer.

El escenógrafo y figurinista ha trasladado al momento actual esta ópera de Strauss en la que los personajes de la popular comedia del arte tienen su paralelismo hoy en la figura de los 'punks'.