MADRID, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
El ciclista español Mikel Landa (Movistar Team) ha asegurado que el podio del Tour de Francia "no está lejos" y que espera poder "luchar" por él, y que tenía "muchas ganas" de que llegase el día de descanso para poder recuperarse de unas molestias en la espalda, que lleva arrastrando desde su caída en Roubaix en los Alpes.
"Será bonito correr cerca de mi gente, de mis carreteras, y daré el máximo. Ojalá lleguemos al podio; realmente no está muy lejos, aunque parezca que lo esté, porque los Pirineos pueden dar muchas vueltas a la carrera. Estamos todos muy cansados y quedan etapas duras. Hasta ahora se ha visto que Sky está muy fuerte, pero nunca se sabe", señaló el vasco, que es sexto en la clasificación general, en las declaraciones facilitadas por su equipo.
El corredor de 28 años ha entrado en el puesto 41 en esta última etapa de domingo antes del descanso y mantiene su optimismo de cara a las próximas etapas. "Hoy sí que he sufrido menos y por fin he ido mejor, tras otro mal día con la espalda ayer sábado. Tenía muchas ganas de que llegase el día de descanso, para recuperarme bien y, ojalá, volver al nivel que esperábamos antes de venir aquí", explicó.
Landa sufrió una caída en uno de los recorridos en los Alpes que ha lastrado su rendimiento. Sin embargo, el alavés se mostró contento con su actuación. "Tras mi caída en Roubaix afronté esas tres etapas de Alpes con el golpe encima y no puedes recuperar igual. Cuando sufres caídas te van apareciendo 'cosas', molestias que te impiden estar al máximo. Es lo que tiene. Aun así, llegamos con ganas a esa última semana", finalizó.
