KUWAIT, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El FC Barcelona cerró con empate frente al Kazma de Kuwait (1-1) el año más exitoso de su historia, en un partido amistoso que se perdieron Messi, Xavi, Iniesta o Alves y cuyos mayores alicientes fueron la vuelta a los terrenos de juego de Gabriel Milito y el bonito gol de vaselina que anotó Bojan.
Con la resaca del Mundial del Clubes todavía a cuestas, el Barcelona jugó un partido amistoso cuya única motivación era económica. Ante esta situación, Pep Guardiola alineó un equipo casi reconocible en el que destacó la entrada de Milito y la presencia de canteranos como Bartra, Thiago Alcántara, Jonathan Dos Santos y Víctor Vázquez.
El partido, concebido como una fiesta para un enardecido público local que se entregó al Barça, transcurrió con el ritmo cansino que caracteriza a un partido de pretemporada Y los goles llegaron en los últimos minutos. Bojan anotó una vistosa vaselina que presagiaba la victoria azulgrana (min.80), pero Zafiri, de jugada personal, superó a Pinto y empató en el último suspiro (min.92).