MILÁN (ITALIA), 14 Mar. (EUROPA PRESS) - Massimo Moratti, presidente y accionista del Inter de Milán, consideró una "bofetada" a su club la sentencia de la Comisión Disciplinaria de la UEFA, con motivo de los incidentes que tuvieron lugar a la conclusión del partido de la Liga de Campeones ante el Valencia y espera que "la sentencia final sea menos dura" con su equipo puesto que "ésta es sólo la sanción inicial".
El máximo dirigente del líder del Calcio reaccionó con sorpresa tras conocer la sentencia que apartaría de los terrenos de juego europeos a los interistas Burdisso y Maicon, sancionados con seis partidos, y a Córdoba y Julio Cruz, con tres y dos, respectivamente. "Ahora esperamos a leer las motivaciones de las sentencias, pero seguramente el Inter presentará recurso", advirtió Moratti.
Moratti cree además que la UEFA se excedió con las sanciones a sus jugadores, que no fueron los que comenzaron la tangana. "Si, creo que el veredicto de la UEFA es excesivo, pero me gustaría entender las razones por las que han impuesto esta sanción. Creo que esto es lo mejor que podemos hacer y después ya veremos si apelamos o no", matizó el presidente de la escuadra italiana.
Moratti no quiso pasar por alto la sanción que recibió el valencianista David Navarro. "Creo que la sanción de Navarro tiene otras connotaciones en cuanto al tiempo de cumplimiento se refiere aunque se le excluya de toda competición", sentenció.
"Además, ayer se vio, en el partido disputado en Old Trafford, que conmemoró el 50 aniversario del Tratado de Roma, que la relación entre Materazzi e Ibrahimovic con Cañizares y Ayala, los jugadores del Valencia en el choque, fue de lo más normal. Estas cosas pasan en el fútbol y luego rápido se olvidan las diferencias", concluyó el máximo dirigente del equipo italiano que dirige Mancini.
