SAN SEBASTIAN 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
El jugador de la Real Sociedad Mikel Alonso tiene, como el resto de su equipo, la vista fija en el primer partido del año ante el CA Osasuna, un choque al que el equipo donostiarra debe "salir a morder si quiere que sea el inicio de un cambio de rumbo en la errática trayectoria txuri urdin.
El tolosarra tiene claro que deben "ponerse las pilas y trabajar" porque el partido del sábado está a la vuelta de la esquina, "y lo que hay que hacer es salir a morder", ante un equipo "que está en racha", pero que espera que llegue "menos lanzado que antes de las Navidades".
Es un encuentro "importante" porque la Real ya no puede ir "más para abajo" y debe "empezar a sumar ya" de tres en tres, "y si es en enero mejor". "Si no lo conseguimos está claro que no vamos a salir, sino que cada vez la soga apretará más", advirtió el jugador, que apuntó que la clave es que cada jugador "se centre en su rendimiento". "Si damos todos lo máximo claro que vamos a ir para arriba".
A nivel colectivo, Mikel Alonso sólo quiere "olvidar el mal año pasado". Y personalmente también tiene "poco que pedir: tener salud", básicamente, y, a ser posible, jugar algo más que en 2006. "De titular he jugado cuatro partidos esta temporada, con un entrenador o con otro. También he estado lesionado, pero claro que preferiría jugar más".
El mayor de los Alonso se considera "preparado para jugar", después de unas semanas lesionado. "Tengo aún algunas molestias, pero estando parado tampoco mejoro mucho más. Lo importante es que puedo trabajar con el grupo", concluyó.