SEVILLA, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
El consejero deportivo del Betis, Luis Oliver, se ha despedido del cargo asegurando que su marcha "no es un adiós, sino un hasta luego", ya que está convencido de que regresará al club en cuanto se resuelva el contencioso sobre las acciones de Manuel Ruiz de Lopera.
Oliver quien, como se recordará, accedió al Consejo de Administración en julio pasado, como cabeza visible de la empresa 'Bitton Sport', compradora de las acciones de Lopera, dejará de ejercer tal función noche, tras nombrarse una nueva directiva en la Junta Extraordinaria de accionistas del club.
En este sentido, Oliver, que no ha podido ocupar puestos de mayor responsabilidad al estar ese paquete mayoritario de acciones bajo administración judicial, presentó la nueva sala de prensa del estadio Benito Villamarín y puso de relieve los logros alcanzados por el Betis en estos cinco meses.
"Hemos intentado modernizar al club, pero no nos ha dado tiempo a hacer todo lo que queríamos, porque no nos han dejado. Llegamos a un club del siglo XX y hemos intentado que sea un club del siglo XXI. Por el bien del Betis esperemos que esta junta judicial dure poquito tiempo. Que nadie se crea que será la panacea de nada. Son medias provisionales que no harán bien al Betis", advirtió.
Y es que Oliver considera que se ha realizado una "labor deportiva impecable", como demuestran la clasificación de un Betis que es líder de la Liga Adelante, con seis puntos sobre el tercero.
"El equipo apunta a 100 goles y a 100 puntos si seguimos esta trayectoria. El listón deportivo está muy alto y el listón social en cinco meses no se puede hacer mejor: sala de prensa, nombre del estadio, la ciudad deportiva, el césped, el museo, es recoger lo que los béticos querían", sentenció.
Así las cosas, el navarro dio gracias tanto a la afición como a los críticos con su trabajo. "Nos vamos con la alegría del buen trabajo y de que volveremos en un breve espacio de tiempo, porque esto no es un adiós, sino un hasta luego", recalcó.
"LA BATALLA JUDICIAL EMPIEZA HOY".
Pero ello no le impidió atacar a los administradores judiciales ya que, además, uno de ellos, el ex jugador y componente de la terna de administradores judiciales, Rafael Gordillo, será el nuevo presidente.
"Un club de fútbol no se puede llevar desde un juzgado porque es algo que nunca ha salido bien. Los expertos juristas hablan de dos, tres o cuatro meses para que se pronuncie la Audiencia, pero los papeles han estado retenidos hasta hace diez días. Si la Audiencia no nos da la razón está el Supremo, el Constitucional. La batalla jurídica empieza hoy, porque creemos que es una junta ilegal, no sólo nosotros, sino el fiscal también", advirtió.
Igualmente, confirmó que no asistirá a la junta que, consideró, ha sido organizada únicamente para echarle a él del consejo, aunque eso no le quita de insistir en su reto a los consejeros entrantes y dejar caer que la deuda del Betis se cifra en 60 millones de euros.
"Tengo la seria duda de que lo vayan a hacer mejor que nosotros, ahí está el listón, que lo hagan mejor que nosotros, ahí está el listón. Y que nadie se olvide de que las acciones hay que pagarlas, que van a ser de alguien en un momento u otro. De todas formas, por muy mal que lo hagan los administradores no creo que vayan a perjudicar al equipo, porque está lanzado", espetó.
