Fútbol/Primera.- (Crónica) El proyecto de regeneración de Capello se hunde en El Madrigal (1-0)

Actualizado: domingo, 28 enero 2007 1:21

Los blancos ofrecieron una imagen lamentable

El Atlético volvió a tropezar en el Calderón

MADRID, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -

El estadio de El Madrigal, y un Villarreal aseado, pero sin el brillo de antaño, fue el escenario elegido por el Real Madrid para firmar su enésimo ejercicio de impotencia futbolística (1-0) y mostrar la mayor de las mediocridades justo cuando disponía de la oportunidad para auparse al liderato del campeonato.

El Real Madrid volvió a ser un equipo sin ideario futbolístico, aunque Capello repitiera el 'once' que ganó hace una semana en Mallorca, pero también sin sangre ni espíritu, y es que un aire enrarecido empieza a barrer el prestigio de club tan afamado.

Los de Capello fueron dominados, pero no controlaron en defensa las escasas acometidas del Villarreal, y literalmente no existieron en ataque. Los números le siguen acompañando, con indudable mérito porque los réditos conseguidos son muy superiores a sus argumentos futbolísticos, pero las versiones que ofrece en cada campo de España empiezan a ser insoportables para sus aficionados.

El Real Madrid nunca encontró puerto donde amarrar. Gago nunca se encontró cómodo con la presión del Villarreal y sin el argentino, el balón que posee el conjunto blanco no tiene intención alguna porque desde la medular hasta la portería rival no cuenta con ningún jugador notable, a excepción de los apuntes esbozados por Higuaín.

Capello insiste con Robinho y Reyes, tampoco tiene más baraja, pero sevillano y brasileño son insignificantes en campo contario. Tampoco mejora la cuestión cuando el Real Madrid recula porque Cannavaro nunca soluciona nada, Helguera achica como puede, pero 'pega' la defensa a la portería de Casillas y Diarra corre, corre y sólo corre.

El Villarreal tardó en aprovechar todas las facilidades del equipo blanco, hasta que apareció el jugador con mayor progresión de los que estaba en el terreno de juego, el chileno Matías Fernández, quien supo ver el hueco entre Cannavaro y Sergio Ramos para poner en bandeja el gol de la victoria al joven canterano Marcos, de 19 años.

Con el gol a favor del Villarreal el partido murió porque el Real Madrid mostró su imagen de equipo entregado, sin recursos para tratar de levantar soluciones adversas y sin peso futbolístico. Un nuevo tropiezo de los blancos, el sexto de la temporada, y sobre todo sin señas de que su fútbol pueda mejorar para aspirar al menos a perder con dignidad.

EL CALDERON ENTIERRA LAS OPCIONES DEL ATLÉTICO

El Atlético de Madrid, por su parte, volvió a tropezar en la misma piedra, su estadio y el que le está privando de luchar por cotas mayores aunque su fútbol siga siendo tan flojo como el de sus vecinos de Chamartín.

Los rojiblancos tuvieron que esperar a recibir un gol para levantar el ánimo y aunque consiguieron igualar de inmediato el tanto de Zigic, la gasolina no les duró para culminar la remontada. Un nuevo empate que decepciona a la hinchada rojiblanca, que se está costumbrado a la irregularidad de su equipo.

Aguirre apostó por Maniche y Luccin en la medular, pero volvióa echar en falta el juego por la bandas. Ni Jurado ni Galletti resolvieron nada en favor de los locales en una primera parte muy pobre en lo futbolístico.

Tampoco mejoró sus argumentos ofensivos en el segundo acto, al menos hasta que el Racing se inventó un gol por medio de Munitis, quien cedió de manera espléndida al gigantón Zigic para que éste resolviera.

El Atlético tuvo arrestos para empatar de inmediato por medio de un cabezazo de Pablo, pero el partido no dio para más y el equipo rojiblanco sigue en posiciones de privilegio aunque dejándose puntos que al final puede anhelar.