LONDRES, 13 Oct. (EP/AP) -
El ex atleta canadiense Ben Johnson no se declaró sorprendido con la confesión de dopaje de la velocista estadounidense Marion Jones y ahora espera que otros atletas reconozcan que hicieron trampas al usar sustancias para mejorar su rendimiento.
Johnson ganó la medalla de oro y estableció un nuevo récord mundial, con 9 segundos y 79 centésimas en la final de los 100 metros de los Juegos Olímpicos de Seúl en 1988, pero luego dio positivo por esteroides y le arrebataron la medalla y la marca.
"Me lo esperaba", dijo Johnson sobre Jones, quien la semana pasada confesó haber usado esteroides cuando ganó cinco medallas en los Juegos Olímpicos de Sydney en 2000.
"Yo creo que todos a nivel internacional usan drogas para mejorar su rendimiento y que es algo generalizado y que va a continuar", indicó el canadienses en una entrevista a 'Al-Jazeera'. "Mucha más gente va a confesar", añadió.
Johnson indicó que para los atletas de hoy es más difícil esconder los positivos. "Las pruebas son mejores, y la gente que trata de esconder esta información estará en aprietos", afirmó.