BARCELONA, 1 May. (EUROPA PRESS) -
El FC Barcelona de hockey patines intentará revalidar la Liga Europea conseguida la pasada temporada en el Palau Blaugrana en Bassano del Grappa (Italia) en la 'Final Four' que se celebrará este fin de semana, donde se medirán al equipo anfitrión del Breganze en semifinales --este sábado a las 20.30 horas-- y, de pasar a la final, se mediría al ganador del otro duelo entre el Porto y el Patí Vic, con lo que podría haber final catalana.
Los blaugranas, dirigidos por Ricard Muñoz, se jugarán mantener la corona europea lejos de casa y, además, empezarán esa penúltima defensa del título contra los anfitriones, un Breganze que llega fuerte tras ganar la Copa italiana y seguir fuerte en la Liga. Club histórico, quiere volver a ser fuerte en Europa y ello pasa por enrocarse en la condición de local, escudarse en su afición, y ganar al poderoso Barça.
El Breganze ha llegado a la fase final después de disputar la fase de grupos contra Vic, Valongo y Ginebra. En los cuartos de final eliminó al potente Forte dei Marmi. El entrenador es el catalán Guillem Cabestany, extécnico del Vendrell, y en su primer curso en Italia su equipo ha conseguido la Copa de Italia, superando al Viareggio en la final y ganando el título después de 40 años sin lograrlo.
De Oro, Mattia Cocco y el portero Riccardo Gnata son piezas importantes para Cabestany, pero el exblaugrana Jordi Adroher ha dado un salto de calidad al equipo. Adroher jugó en el Barça dos temporadas (entre 2009 y 2011) y, tras su paso por Reus, está disputando su primer curso en Italia. En la fase regular, ha sido el tercer máximo goleador del equipo (26 dianas).
Los blaugranas intentarán hacerles frente y ganar para confirmar su buena temporada en esta Liga Europea. Hasta el momento, los veinte veces campeones de la competición han superado a Benfica, Bassano y Quevert en la fase de grupos, ganó a los también italianos del Valdagno en los cuartos tanto en la ida como en la vuelta del Palau y, ahora, quieren confirmar este buen camino.
En caso de haber final entre Barça y Vic se repetiría la vivida en 2010, con triunfo blaugrana. De hecho, los de Osona no han podido ganar todavía la máxima competición europea pese a que también llegó a la final en 2009. Por contra, el Porto, su primer rival, tiene dos títulos de Liga Europea y parte como favorito pese a haber perdido recientemente la Liga portuguesa.
