MADRID, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
La tenista estadounidense Serena Williams accedió este jueves a su sexta final de Wimbledon, tercer 'grande' de la temporada, tras derrotar a la rusa Maria Sharapova, y avisó del peligro que supone su rival en la final del sábado, la española Garbiñe Muguruza, que ha dado la sorpresa en la primera semifinal del torneo británico.
"Me entraron los nervios porque era una semifinal y porque llevaba tiempo sin jugar una final aquí", indicó la mejor tenista del mundo. Pese al abultado marcador y su destreza desde el fondo de la pista, la norteamericana no quitó mérito a su rival. "Sharapova jugó bien, pero me las arreglé para mejorar. No fue fácil, fue un partido interesante", añadió.
"Estoy muy feliz de haberme llevado la victoria y de estar en la final de Wimbledon", explicó la norteamericana, que fue preguntada por Garbiñe Muguruza, quién ya la venció en la pasada edición de Roland Garros. "Garbiñe es una gran jugadora; ya me ganó antes y no será un partido nada fácil, en absoluto. Tendré que pelear mucho", apostilló.
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