Venus Williams gana la final y se confirma como la gran dominadora del torneo en la última década

Actualizado: sábado, 7 julio 2007 20:08

LONDRES, 7 Jul. (EUROPA PRESS)

La tenista norteamericana Venus Williams superó (6-4 y 6-1) en la final femenina de Wimbledon a la francesa Marion Bartoli, conquistando su cuarto entorchado en el 'All England Tennis Club' y afianzándose como la jugadora más consagrada de la última década en el torneo, en la que además de los citados títulos, alcanzó otras dos finales más.

Hay tenistas que están hechas para determinados torneos. Es el caso de la hermana mayor de las Williams, sumamente arraigada con el frío, el viento, la lluvia y las peculiares condiciones que sostienen a este torneo legendario. En 2000 apareció en la central del 'All England Tennis Club' una musculosa jugadora que impidió a su compatriota Davenport revalidar el título que consiguió en la anterior edición.

Ocho años después, más experta, con más competencia y con un palmarés que da vértigo, Venus Williams consiguió, en un complicado choque, ante la 'outsider' Bartoli, su cuarto título de Wimbledon, que si no es por su hermana Serena (ganadora en 2002 y 2003) ya serían seis.

La contienda arrancó con una arrolladora jugadora norteamericana, quien pronto logró su primer 'break', para avanzar en el set hasta el 3-0. Entonces, cuando todo apuntaba a un exiguo primer set, los errores desde el fondo de la pista de Williams se sucedían a medida que la jugadora gala mostraba un poderío desde la línea de fondo, similar al que le sirvió para derrotar en semifinales a la número uno del mundo, Justine Henin.

Descarada en el grueso del partido, con dotes para dominar un partido, a Bartoli, desquitada de los nervios que la atenazaron en los primeros compases, le faltó decidir en los momentos críticos que se presentan en una final. Con 5-4 para la estadounidense, la francesa no aguantó su servicio y cedió el primer envite de la final: 6-4.

La segunda manga, intensa y con un combate entre ambas jugadoras desde el fondo de la pista, comenzó con una ruptura favorable para Williams (2-0) y un parón de diez minutos por sendas lesiones de ambas jugadoras. En la reanudación del choque, las molestias musculares de la norteamericana repercutieron en su tenis, jugando demasiados metros por detrás de la línea de fondo.

Sin embargo, en estas latitudes la veteranía de la estadounidense es un gran aval. Venus apostó hasta la conclusión de la final por acortar al máximo los puntos, anulando cualquier iniciativa de la francesa por alargar el partido. La hermana mayor de las Williams volvió a romper el saque de su adversaria y con 5-1 servía para ganar su cuarto título de Wimbledon.

Evidentemente, no falló. Aprovechó su segundo punto de final para alzarse con el torneo de una manera poderosa, intimidatoria. Sacó a más de 200 kilómetros por hora sobre el cuerpo de Bartoli, que no pudo poner el resto en juego y perdió el encuentro, dejando un sabor entre el público que abarrotaba las gradas de la central del 'All England Tennis Club' de jugadora importante.