MADRID, 23 mar. (EDIZIONES)
Tras una semana de lluvias, este australiano se encontró con que de repente tenía sus propias cataratas del Niágara en su propiedad debido a las intensas lluvias de los últimos días.
Scott Smythe, de 48 años, de Queensland, Australia no daba crédito a la cantidad de agua que se había acumulado en su propiedad de un acre cuando el domingo 21 de marzo, decidió salir a pasear con su perro.
En las imágenes grabadas por Scott se puede ver la cantidad de ríos y cascadas que se formaron en el pequeño bosque de su propiedad debido a las lluvias torrenciales que han estado azotando varias zonas del sureste de Queensland desde el lunes.
"Me gusta el agua, pero sé que puede causar daños", confesó Scott a Caters. De hecho, debido al agua, el camino y una de las vallas del jardín sufrieron algunos daños.