MADRID, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las seis grandes constructoras cotizadas, además de Isolux Corsán, Comsa y Rubau compiten por hacerse con el contrato de construcción del túnel por el que discurrirá la línea ferroviaria de Alta Velocidad (AVE) a su paso por la ciudad de Barcelona, una obra presupuestada en 246,20 millones, informaron hoy a Europa Press en fuentes del sector.
La complejidad técnica de esta infraestructura llevó al Ministerio de Fomento a retrasar el plazo para su ejecución tres años, fijandolo así en 2012, frente a la estimación inicial de 2009.
En concreto, compiten por el contrato Sacyr, ACS, Ferrovial, Acciona y FCC, todas ellas en solitario. También pujan el consorcio integrado por OHL, Construcciones Rubau y Acsa, y el formado por Isolux Corsán y Comsa. Todas ellas han presentado ya sus ofertas al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), ente público promotor de la obra.
El contrato contempla la construcción del tramo de 5,64 kilómetros de longitud que unirá las dos estaciones de tren de la Ciudad Condal. Parte de la actual estación de Barcelona-Sants para discurrir en túnel hasta la futura estación de La Sagrera.
Los primeros 422 metros y los últimos 395 metros del trazado se realizarán mediante el sistema de falso túnel entre pantallas, mientras que los 4,82 kilómetros restantes se construirán con el empleo de tuneladora.
Este trazado es el acordado entre las tres administraciones (Ministerio de Fomento, Generalitat y Ayuntamiento de Barcelona) y con él, según aseguran, se consigue que el túnel entre Sants y La Sagrera no discurra en ningún punto de su recorrido bajo edificios, y lo haga siempre por la zona central de las calles y avenidas de L'Eixample.
PROTECCION DE LA SAGRADA FAMILIA.
El contrato también incluye la ejecución de un tratamiento de protección para el tramo de túnel que pasa al lado del templo de la Sagrada Familia de Gaudí para evitar que las obras le causen daño alguno.
En concreto, en el tramo de recorrido próximo al templo de la Sagrada Familia, con carácter previo al paso de la tuneladora, será preciso disponer una protección específica mediante una pantalla permeable de pilotes de 1,5 metros de diámetro y unos 40 metros de profundidad.
Con esta barrera se pretende asegurar que los movimientos del terreno generados por las obras de construcción del túnel no se transmitan al templo.
Además, se deberá construir un dado longitudinal de hormigón junto a la pantalla y mejorarse el terreno mediante inyecciones de consolidación. Los procedimientos constructivos garantizarán también la seguridad e integridad del terreno y de los edificios situados en las proximidades.
