Economía/Empresas.- Las medianas constructoras comienzan a asociarse para pujar por el plan de renovación de autovías

Actualizado: jueves, 28 diciembre 2006 14:23

MADRID, 28 Dic. (EUROPA PRESS) -

Las medianas constructoras integradas en la Asociación Nacional de Constructores Independientes (Anci) han comenzado a buscar alianzas entre ellas y con grupos terceros para participar en el plan de renovación de autovías de primera generación que el Ministerio de Fomento acaba de poner en marcha con un presupuesto inversor total de 6.000 millones de euros, informó hoy la patronal.

Entre las constructoras integrantes de esta asociación destacan Ploder, Sando, Aldesa, Azvi, Rover Alcisa y Rubao, entre otras, muchas de ellas con facturación superior a los 500 millones de euros.

El plan de acondicionamiento de las autovías actuará sobre un total de 2.096 kilómetros y su objetivo es mejorar sus características de calidad y seguridad a las de más moderna construcción.

Las autovías de primera generación se construyeron a mediados de la década de los ochenta en el marco del primer Plan General de Carreteras y, en su mayor parte, se llevaron a cabo por duplicación de los trazados ya existentes.

El plan se divide en dos fases. La primera se licitará entre este año y 2007 y comprende los 16 contratos que afectan a 1.522 kilómetros que se prevé estén ejecutados en el horizonte de 2009. La segunda parte se abordará a partir de 2008 para que las obras concluyan sobre 2011.

'PEAJE EN SOMBRA'.

El proyecto contará con la participación de la iniciativa privada, dado que se financiará mediante el sistema denominado 'peaje en la sombra'.

En virtud de este sistema, las empresas adjudicatarias de los contratos se encargan de realizar las obras y posteriormente explotar y conservar la vía durante un periodo de veinte años, a cambio de un canon anual que percibirá del Estado en función del tráfico y el estado de conservación de la carretera, que queda así libre de peaje para los usuarios.

Fomento está a punto de sacar a concurso los ocho primeros contratos del plan, ya autorizados por el Consejo de Ministros. Suman un importe de unos 5.200 millones de euros y afectan a tramos de la A-2, la A-31, la A-1 y la A-4.