Los expertos inmobiliarios prevén un mantenimiento de la oferta ante la ralentización de la demanda
MADRID, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -
El incremento del precio de la vivienda se mantendrá entre el 8% y el 10% a lo largo de 2007 debido a que la desaceleración que comenzó a experimentar desde el segundo trimestre de 2006 no se ha trasladado aún a los precios del suelo, según el presidente de la Asociación Profesional de Expertos Inmobiliarios de España (APEI), Óscar Martínez.
"Los promotores han comprado caro y los presupuestos de construcción siguen siendo altos", declaró a Europa Press el presidente de la asociación, quien estimó que esta circunstancia frenará de momento una mayor ralentización de los precios de la vivienda. Martínez añadió además que los solares siguen teniendo una demanda "muy importante", lo que mantiene el alza de sus precios.
Por otra parte, precisó que pese a la reciente subida del precio de referencia de la vivienda protegida en un 4,7%, en la actualidad "es imposible" construir este tipo de vivienda en el sector privado ya que, nuevamente, no existe suelo a precio de VPO.
En este sentido, explicó que el incremento establecido "no supone una cantidad importante", más aún si se tiene en cuenta que con la entrada en vigor a partir de marzo de todos los documentos básicos del Código Técnico de Edificación (CTE) pendientes se darán aumentos superiores en los costes de construcción.
FORTALEZA DE LA OFERTA Y RALENTIZACIÓN DE LA DEMANDA.
Por otra parte, el presidente de APEI aseguró que la oferta de viviendas existente en la actualidad "es difícil de parar", por lo que consideró improbable que a lo largo de 2007 se dé una completa adecuación de ésta con una demanda que presenta signos de ralentización desde el segundo semestre del 2006.
Según Martínez, no hay factores que incidan "tan directamente" sobre la oferta como sobre la demanda, con lo que su ralentización será mucho más progresiva. "La inercia del promotor es fuerte, ya que hay inversiones importantes en solares a las que tienen que dar salida", añadió.
En cuanto a la demanda, el presidente de los expertos inmobiliarios confirmó una ralentización que se está reflejando en unos plazos cada vez más amplios de venta de las viviendas. En esta situación, las ventas de inmuebles se concentran, según Martínez, en "viviendas de pocos metros y precios bajos", así como en aquellos inmuebles que, contando con mayores superficies, se encuentran más alejados de los núcleos urbanos.
Desde APEI, se constata además que esta ralentización de la demanda afecta, no sólo a la vivienda nueva sino también a la de segunda mano, mercado que desde hace algunos años viene siendo cubierto, a su juicio, por la demanda de los inmigrantes, que compraban aquellas viviendas "de difícil salida".
En este sentido, Martínez señaló que las entidades bancarias están comenzando a poner cada vez más trabas a los inmigrantes a la hora de conceder créditos hipotecarios, lo que está suponiendo una menor compra de viviendas por parte de este colectivo.
A su vez, esta situación supone un descenso de las ventas de vivienda nueva a través de la demanda de reposición, ya que, según el presidente de APEI, aquellos propietarios que vendían su primera vivienda para comprar otra nueva, encuentran cada vez mayores dificultades para encontrar compradores ante la ralentización del mercado de segunda mano.
LOS EXTRANJEROS EMPIEZAN A VENDER.
Los expertos inmobiliarios consideran que la ralentización de la demanda ya se ha hecho patente en el caso de la población extranjera que tradicionalmente compraba viviendas en el litoral español. Así, Martínez consideró que el extranjero es actualmente "más vendedor que comprador".
"El extranjero está vendiendo en este momento", indicó el presidente de APEI antes de añadir que la demanda existente se orienta cada vez más hacia los apartamentos pequeños, en detrimento de la habitual compra de chalets.
