MADRID, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
El responsable del gabinete económico de CC.OO., Miguel Ángel García, calificó hoy la reforma fiscal presentada ayer por el Gobierno de "decepcionante", porque mantiene una estructura similar a la anterior, y mostró su preocupación ante el "mensaje perverso" que se intenta transmitir a los ciudadanos de que "se pueden conseguir buenos servicios públicos con continuas rebajas en los impuestos directos, lo que no es cierto".
En declaraciones a Europa Press Televisión, García insistió en la inquietud que para Comisiones Obreras supone el que el Gobierno "desprecie" la recaudación de los poderes públicos "que se necesita para invertir en educación, servicios sanitarios, o investigación y desarrollo".
Asimismo, señaló que una reforma del IRPF y del impuesto de sociedades para rebajar los impuestos no era "una prioridad en España puesto que es uno de los países de Europa en donde menos impuestos se paga".
En este sentido, defendió que los cambios introducidos mantienen un sistema que es "injusto en la distribución porque el mayor beneficio lo obtienen las rentas más altas y sigue habiendo un excesivo buen trato para los rendimientos del capital". Por tanto, para el sindicato Comisiones Obreras, el nuevo sistema de tributación que entrará en funcionamiento en 2007 "es mejorable en equidad y suficiencia".
Uno de los aspectos en que el responsable del gabinete económico de CC.OO. se mostró más crítico con la reforma es en el punto que se refiere al trato fiscal que reciben los planes de pensiones privados con respecto al sistema público.
En su opinión, el nuevo IRPF estipula un trato más favorable a los sistemas de ahorro privado respecto a los públicos, lo que calificó como "una forma de competencia desleal que cuestiona el futuro del sistema público de pensiones a medio y largo plazo".
SIN DEDUCCIONES PARA LOS INQUILINOS
Otra de las cuestiones que finalmente no se han visto reflejadas en el texto que presentó ayer el ministro de Economía, Pedro Solbes, y con la que se especulaba es la introducción de una deducción a nivel nacional para las personas que están de inquilinos en una vivienda de alquiler. Para García, la falta de apoyo a esta forma de acceso a la vivienda supone el desaprovechamiento de la oportunidad de que en España haya otra forma de acceso a la vivienda.
"Aumentar las ayudas económicas para el acceso a una vivienda no se soluciona sólo con buenas palabras, y la inclusión de una deducción en el IRPF no sólo para los propietarios o los que compran una vivienda, sino también para los inquilinos, sería una buena forma de avanzar en el camino de la moderación en los precios de la vivienda", afirmó.
Por último, como único aspecto positivo, García señaló el "más progresivo y progresista sistema de hacer las deducciones familiares y por hijos con la introducción de un tramo a tipo 0 que tiene más en cuenta la circunstancias familiares y la renta y no sólo el número de hijos".