BERLIN, 6 Mar. (EP/AP) -
La compañía energética alemana E.ON se encuentra en conversaciones con Irán sobre una acuerdo potencial para la compra al país de gas natural, un paso que podría ayudar a Alemania a reducir su elevada dependencia energética del combustible ruso, informó hoy la portavoz de la división gasista de la empresa, E.On Ruhrgas, Tatjana Dreyer.
Según Dreyer, Irán es uno de los países que E.ON ha estado considerando para buscar fuentes alternativas de suministro de gas. Un pacto con el país ayudaría a reducir las preocupaciones de Alemania sobre si Moscú es un proveedor fiable tras los recientes incidentes registrados sobre el suministro por los conflictos del Kremlin con diversas repúblicas ex soviéticas.
"E.ON Ruhrgas ha estado valorando durante algún tiempo la posibilidad de obtener gas natural licuado (GNL) y está en conversaciones con varios productores", señaló la portavoz de E.ON. "Uno de estos países productores, es, por supuesto, Irán, que posee las segundas reservas de gas natural más importantes del mundo", agregó.
"En nuestras negociaciones con el país somos estrictamente rigurosos con la normativa y con los requerimientos del Gobierno alemán", subrayó Dreyer. "Con este objetivo estamos en contacto cercano con las oficinas del Gobierno pertinentes", aseguró.
Estso comentarios parecen ofrecer explicaciones sobre la delicada situación en la que se encuentran las relaciones diplomáticas con Irán, mientras que el país está recibiendo presiones de los países occidentales, incluyendo Alemania, para que retire su programa de enriquecimiento de uranio. Mientras Irán justifica su programa nuclear asegurando que lo necesita para la creación de centrales energéticas, EE.UU. asegura que el fin de este programa es el desarrollo de armas.
MAYOR FLEXIBILIDAD Y MENOR DEPENDENCIA DE RUSIA
E.ON Ruhrgas está buscando un acuerdo de suministro a largo plazo de gas natural licuado para la nueva terminal que pretende construir en la cosa Norte de Alemania, en Wilhelmshaven. La compañía tiene un memorando de entendimiento con Argelia, pero aún no ha firmado ningún acuerdo de suministro con el país.
Este gas natural llegaría al país en barcos metaneros con sistemas de refrigeración en vez de a través de gasoductos subterráneos, sistema utilizado por Rusia.
Esto implica un sistema mucho más flexible, pues las reservas llegarían en barco desde el país productor con una terminal para manipular el gas y licuarlo, para posteriormente calentarlo y llevarlo a los gasoductos.
Además, cesarían las crecientes preocupaciones sobre el suministro motivadas por los conflictos de interrupción ocasionados por las disputas de precios entre las compañías rusas y las repúblicas ex soviéticas, como el reciente caso de Bielorrusia.
Alemania importa cerca de la tercera parte de su suministro gasista a Rusia, y se espera que la demanda de gas del mercado del país crezca aún más durante los próximos años.
