Hace un llamamiento a "no mirar atrás", afirma que respetará a Enel y Acciona y apela a mantener las "raíces" del grupo MADRID, 20 Jun. (EUROPA PRESS) - El presidente de Endesa, Manuel Pizarro, hizo hoy un llamamiento durante la junta de accionistas del grupo a "no mirar atrás", tras el largo proceso de ofertas de adquisición vivido desde septiembre de 2005, pero pidió mayor seguridad jurídica para garantizar la llegada de inversiones extranjeras y para su propia "seguridad personal". "Pedimos seguridad jurídica", aseguró Pizarro, quien dijo estar "harto" de los líderes que se "pasean" en el extranjero dando consejos sobre el funcionamiento de las instituciones. Esta seguridad, señaló, es necesaria para procurar la llegada de capital exterior, puesto que "España necesita al menos el 50% de inversión extranjera en la bolsa". "Seguridad jurídica es seguridad personal, ir por la calle sin que te sigan ni te escuchen ni te pase nada", afirmó el presidente, que pidió una "legislación ordenada, clara y sencilla", y que emplazó a la Administración a "que aplique la ley con imparcialidad y sin sectarismos". Sin hacer alusiones concretas, Pizarro afirmó que "la Justicia tardía no es Justicia" y destacó la importancia de "respetar las decisiones" de los organismos reguladores. Además, apeló al "patriotismo" en un momento en el que "España está jugando a ser un país de calidad". RESPETO A ENEL Y ACCIONA. Durante su discurso, el presidente de Endesa mostró su "voluntad firme de salvaguardar la decisión soberana de los inversores sobre el futuro de la compañía" y dijo que, "al margen de otras consideraciones", respeta a los "accionistas que apuestan por el futuro", en alusión a Enel y Acciona. El consejo de administración, señaló, se pronunciará de "forma adecuada" sobre la oferta de Enel y Acciona tras su aprobación por los organismos reguladores, pero los accionistas decidirán en última instancia como "legítimos propietarios" de la compañía. El presidente de Endesa hizo además un llamamiento a la necesidad de "no mirar atrás" tras las ofertas de compra. "No me gusta mirar atrás" y acabar "convertidos en estatuas de sal", afirmó antes de calificar esta postura de "trabajo inútil que conduce a la melancolía".
Pizarro recordó que "casi la mitad del capital ha cambiado de manos", y en un momento posterior del discurso destacó los avances de Enel en varios ámbitos del sector energético. Sobre su actuación durante las OPA lanzadas sobre Endesa, el presidente de la compañía dijo que su papel "ha sido facilísimo" y que se guió por un principio: "He hecho lo que habría hecho con mi propio patrimonio". "Si alguien viene a quitarte la casa, luchas para que no te la quiten, y si vienen a comprarla, luchas para que te den más precio", afirmó. "Si haces eso, no te equivocas", añadió. MANTENER LAS RAÍCES DEL GRUPO. Pizarro también apeló a la necesidad de mantener las raíces del grupo. "Lo peor que puede hacer una empresa es olvidar sus raíces", porque "el que olvida hacer lo que hace bien acaba pagando la factura", señaló. Junto a esto, dijo que Endesa tiene como principio la sostenilidad, entendida también como "perdurabilidad" y "respeto a la ley", puesto que "la ilegailidad no es sostenible en el tiempo". Otros principios citados por Pizarro ante los accionistas fueron los de transparencia, el establecimiento de códigos rigurosos de conducta, la veracidad y la coherencia en el comportamiento y, en último lugar, la relación amable con accionistas, clientes y otras partes. En alusión al año y medio durante el que Endesa ha sido objeto de ofertas de compra, Pizarro dijo que "desde el primer día" se separó la gestión ordinaria de la compañía de los procesos de compra, y explicó que el consejo de administración se reunió en 26 ocasiones para supervisar el proceso. En total, entre reuniones del consejo, de la comisión ejecutiva, de la comisión de auditoría y de la de nombramientos, hubo 80 encuentros. "No querría que me achacaran que pasamos por aquí de puntillas", apostilló.
