La electricidad casada en el Mibel no estará sujeta al precio fijo de 42,35 MWh

Actualizado: martes, 4 julio 2006 17:37

MADRID, 4 Jul. (EUROPA PRESS) -

La electricidad casada en el Mercado Ibérico de Electricidad (Mibel), que comenzó a operar ayer, no estará sujeta al precio fijo de 42,35 euros por megavatio/hora (MWh) aprobado por el Gobierno para acabar con el déficit de tarifa, según la orden publicada hoy en el Boletín Oficial del Estado.

En concreto, para esta energía adquirida en el mercado a plazo se reconocerá a los distribuidores el coste realizado que resulta de aplicar a esta energía el precio de cada subasta correspondiente a la sesión de negociación en la que esté obligado a participar.

Además, esta orden, que supone normalizar la entrada en funcionamiento del Mibel, recoge que el Gobierno regulará la contratación de energía eléctrica de los distribuidores en el mercado a plazo portugués.

En concreto, la orden contempla que los distribuidores de energía deberán adquirir durante el segundo semestre de 2006 en el mercado a plazo gestionado por Operador del Mercado de Energía de Portugal (OMIP) el 5% de la energía vendida a clientes a tarifa.

La obligatoriedad de adquirir energía eléctrica en el mercado a plazo se fija mediante el establecimiento de un número determinado de contratos de futuros con entrega física a adquirir por cada distribuidor en las subastas mensuales que se celebren los primeros y terceros miércoles de cada mes y en las subastas cuatrimestrales que se celebren los terceros miércoles de cada mes.

El porcentaje del 5% se fija mediante un cálculo que ha tenido en cuenta la demanda del año pasado con la previsión de incremento de demanda para este año.

Cada contrato equivale a la entrega de 1 megavatio/hora (MWh) en carga base, en cada una de las 24 horas de los días correspondientes al período de entrega, de tal forma que la energía adquirida que resulta del número de contratos a adquirir para cada uno de los distribuidores cumple el compromiso fijado en la cumbre Hispano-Lusa celebrada en Évora.

Asimismo, se reconocerá a los distribuidores los gastos derivados de la prestación de garantías y las comisiones que le sean exigidas por la participación en este mercado a plazo.

La verificación del cumplimiento de esta obligación de compra en el mercado a plazo impuesta a los distribuidores será llevada a cabo por la Comisión Nacional de Energía (CNE).