Faconauto teme una subida del Impuesto de Matriculación por el nuevo modelo de financiación

Actualizado: domingo, 29 enero 2006 1:07


MADRID, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -

El secretario general de la Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (Faconauto), Blas Vives, expresó ayer su preocupación ante la posibilidad de que la subida del Impuesto de Matriculación sea "una de las bazas" en la negociación del nuevo modelo de financiación del Estatuto de Cataluña pactada entre el Gobierno y CiU.

Además, considera que el cambio en el sistema de financiación también podría repercutir en el Plan Prever, que finaliza su vigencia el próximo 31 de diciembre y al que se han acogido más de 1,1 millones de vehículos en los últimos tres años.

Faconauto argumenta que con este sistema de financiación, el conjunto del Estado dejará de recaudar un 15% de los ingresos actuales, lo que conllevará, a su vez, una disminución de las aportaciones que realiza a las administraciones autonómicas, obligando a éstas a incrementar la presión fiscal mediante alguna vía que compense la pérdida de recaudación.

La patronal de los concesionarios recuerda que cada vez que se ha producido un cambio en el sistema de tributación o un "ajuste" en el sistema estatutario, ha traído consigo una subida de los impuestos indirectos.

Vives señaló que los impuestos más fáciles de recaudar y que despiertan menos impopularidad entre los ciudadanos con los indirectos que gravan el alcohol, el tabaco y los carburantes. "La subida del Impuesto de Matriculación es también muy tentadora, porque permite a una Administración recaudar desde el primer día de su entrada en vigor", advirtió.

El Consejo de Ministros aprobó en noviembre de 2005 un cambio normativo mediante el que las comunidades autónomas podrán elevar hasta en un 15% el Impuesto Especial sobre Determinados Medios de Transporte (IEDMT), más conocido como Impuesto de Matriculación, frente a la potestad para elevarlo en un 10% con que contaban hasta entonces.

Según las estimaciones de Faconauto, por cada punto de subida de este impuesto, en el conjunto del año se producía una caída de cuatro puntos en las ventas. Si todas las comunidades autónomas elevaran hasta el máximo permitido el tipo del Impuesto de Matriculación, los automóviles se encarecerían un 1% y las ventas de coches se reducirían en 50.000 unidades.