MADRID, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
Durante los tres primeros meses del año el número de parados se incremento en 94.500 personas, un 0,44 por ciento, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA). Con esta subida el número total de desempleados asciende ya a 1.935.000, el 9,07 por ciento de la población activa. Para el Gobierno las cifras de la EPA -que revelan que durante el primer trimestre del año se crearon 85.900 nuevos puestos de trabajo- arrojan una valoración muy positiva y demuestran que en España "el empleo sigue creciendo con fuerza". En cambio, para el Partido Popular los datos son "decepcionantes" y confirman "un cambio de tendencia en el mercado de trabajo, en la que el paro sube, el empleo nacional disminuye y la temporalidad muy alta".
Durante el último año, el paro se redujo en 163.200 desempleados, lo que supone un descenso del 7,78 por ciento, mientras que la ocupación se incrementó en 907.500 personas, situándose la tasa interanual de crecimiento del empleo en el 4,91 por ciento, la misma que en el trimestre anterior. De enero a marzo el empleo creció en 85.900 personas, un 0,44 por ciento más, elevando el número total de ocupados a 19.400.100 personas.
La población extranjera fue la que contribuyó definitivamente a generar empleo durante el primer trimestre del año y mientras que la ocupación de los españoles descendió en 22.300 personas, un 0,13 por ciento, los trabajadores extranjeros aumentaron en 108.200 personas hasta marzo, con un incremento del 4,94 por ciento respecto al trimestre anterior. En todo caso el paro de los extranjeros también aumentó en términos globales y se incrementó en 73.600 personas un 29,4 por ciento más, mientras que el paro de los españoles aumentó de enero a marzo en 20.900 personas, lo que supone una subida del 1,31 por ciento.
MUJERES Y JÓVENES
El desempleo también aumentó para los dos sexos, aunque la subida del paro en las mujeres duplicó a la de los hombres. Así, el paro femenino creció en un 6,8 por ciento con 69.300 desempleadas más, mientras que el masculino lo hizo en 25.200 personas, una subida del 3,07 por ciento. Con estos datos, la tasa de paro masculina se situó en el 6,81 por ciento, en tanto que la femenina repuntó seis décimas, hasta el 12,22 por ciento.
Además de las mujeres, los jóvenes son el otro colectivo que sale peor parado de los datos del ETA, y es que la subida del paro se concentró en el grupo de entre 25 a 54 años, con 87.000 desempleados más que en el trimestre anterior, seguido de la franja de 55 años y más con 9.700 nuevos desempleados, y de los jóvenes de 16 a 19 años con una subida de 4.100 personas. El único descenso lo registraron los jóvenes de 20 a 24 años, donde el paro cayó en 6.200 personas.
En cuanto a la tasa de temporalidad, que Gobierno y sindicatos esperan reducir con la inminente reforma laboral, los trabajadores temporales descendieron en 54.400 personas, un 1,02 menos, mientras que los trabajadores con contrato indefinido crecieron entre enero y marzo en 101.700, un 0,97 por ciento, reduciéndose así la tasa de temporalidad más de cuatro décimas, hasta situarse en el 33,33 por ciento.
RÉCORD DE POBLACIÓN ACTIVA
Para el secretario de Estado de Economía, David Vegara, el incremento del paro durante el primer trimestre del año no supone una "ruptura" en la buena línea del empleo, ni responde a un mal comportamiento del mercado laboral, sino al incremento de la población activa. "El crecimiento del desempleo se debe básicamente al fortísimo crecimiento de la tasa de actividad, con un 57,98 por ciento de la población -cifra récord- que no ha podido ser compensado a pesar de la intensa creación de empleo", afirmó. La población activa aumentó en el último año en un 3,6 por ciento hasta alcanzar las 21.335.900 personas.
Vergara también quiso destacar que los datos del EPA demuestran que "la industria vuelve a la senda de creación neta de empleo en el cómputo anual", y destacó que durante el último año el único sector que perdió empleo fue el agrícola con un descenso del 3,19 por ciento. En cambio, la industria cambió su tendencia y su tasa de empleo creció un 0,49 por ciento, mientras que los servicios y la construcción registraron incrementos del 6,3 por ciento y el 7,3 respectivamente.
"CAMBIO DE TENDENCIA"
La valoración de los datos del paro del primer trimestre de 2006 del Gobierno es diametralmente opuesta a la que realizan desde el PP.
Su secretario ejecutivo de Economía y Empleo, Miguel Arias Cañete, afirmó que "Los datos de hoy (por ayer) son la plasmación en cifras de la realidad económica del país, que ya los ciudadanos venían percibiendo como reflejan las encuestas de opinión más recientes".
"La EPA de este trimestre está marcando un cambio de tendencia en el mercado de trabajo, en la que el paro sube, el empleo nacional disminuye y la temporalidad se mantiene muy alta. Realidades que los indicadores de confianza económica de las familias españolas vienen adelantando desde hace tiempo", denunció Arias Cañete que no dudó en calificar los resultados de "muy decepcionantes".
ANDALUCÍA, CANTABRIA, LA RIOJA
Andalucía, Cantabria y La Rioja fueron las únicas comunidades autónomas en las que el paro no subió durante el primer trimestre del año. En el lado opuesto se sitúan la Comunidad Valenciana, Cataluña y Canarias donde la tasa de desempleo registró los incrementos más significativos.
En Andalucía fue donde más bajó el paro, en los tres primeros meses del año su tasa de desempleo descendió en 12.000 personas. Le sigue Cantabria, con 2.500 parados menos y La Rioja, donde el desempleo descendió en 1.200 personas. El resto de comunidades autónomas vieron como su tasa de paro se incrementó, y entre ellas los ascensos más fuertes se dieron en la Comunidad Valenciana, con 22.800 parados más, Cataluña donde el número de desempleados se incrementó en 14.600 personas y Canarias con 14.400 nuevos parados.
En cuanto a la ocupación Madrid y Andalucía fueron las regiones que encabezaron la creación de empleo en el primer trimestre, al crecer sus ocupados en 50.500 y 49.600, respectivamente. En cambio, en seis comunidades -además de Ceuta y Melilla- se destruyó empleo.
Las caídas más significativas fueron las de País Vasco y Castilla y León, donde se perdieron 12.900 y 11.700 puestos de trabajo respectivamente.
Andalucía
