Economía.- (Ampl.) Trichet dice que la política monetaria es "acomodaticia" y abre la puerta a nuevas subidas de tipos

Actualizado: jueves, 6 septiembre 2007 19:03

FRANKFURT, 6 Sep. (EUROPA PRESS) -

El presidente del Banco Central Europeo, Jean Claude Trichet, subrayó hoy que la política monetaria de la entidad aún se mantiene "en el lado acomodaticio", aunque apuntó que "dado el alto nivel de incertidumbre es necesario recopilar más información antes de establecer conclusiones sobre la política monetaria".

En su comparecencia tras la decisión de tipos del BCE, Trichet afirmó que el consejo de gobierno del BCE tomó la decisión de mantener los tipos de interés en el 4% de manera "unánime" e hizo hincapié en que en su discurso no había utilizado la expresión "fuerte vigilancia" que fue sustituida por "vigilancia cercana", aunque no precisó el significado de este cambio.

El presidente del BCE confirmó que los datos económicos disponibles desde la anterior reunión del consejo han confirmado las previsiones de que la estabilidad de precios sigue siendo objeto de riesgos inflacionistas al alza.

Asimismo, Trichet apuntó las presiones que la expansión crediticia y monetaria podrían ejercer sobre la estabilidad de precios a medio y largo plazo por lo que garantizó que el consejo del BCE seguirá "muy de cerca" su evolución.

"El consejo de gobierno del BCE vigilará muy de cerca todos los desarrollos y actuará de manera firme y adecuada en el tiempo, asegurándonos de que los riesgos para la estabilidad de precios no se materialicen y que las expectativas inflacionistas en en el medio plazo permanezcan firmemente ancladas", dijo Trichet.

REVISIÓN DE LAS PERSPECTIVAS DE CRECIMIENTO E INFLACIÓN.

Por otro lado, Trichet anunció las nuevas previsiones de crecimiento e inflación del BCE para la zona euro. La institución recortó en una décima la estimación de crecimiento para 2007, hasta una banda situada entre el 2,2% y el 2,8%, mientras que mantuvo las previsiones para 2008 en una horquilla de entre el 1,8% y el 2,8%.

"Todos los datos respaldan que la economía de la eurozona crecerá de forma sostenida. En particular, los últimos datos de empleo son favorables y los indicadores de confianza se mantuvieron elevados en agosto", dijo Trichet.

"La actividad económica global previsiblemente continuará robusta y la probable desaceleración en Estados Unidos será más que compensada por el crecimiento continuado de los mercados emergentes", añadió.

Sin embargo, el presidente del BCE indicó que la institución prevé que la inflación armonizada de la eurozona se situará en 2007 entre el 1,9% y el 2,1%, mientras que en 2008 podría moverse en un rango de entre el 1,5% y el 2,5%.

"Los riesgos al alza para la estabilidad de precios incluyen incrementos en los impuestos indirectos más allá de lo anticipado, subidas en el precio del petróleo y en el de los productos agrícolas", apuntó Trichet.

Asimismo, el presidente del BCE advirtió de que podría darse "un aumento de los salarios más fuerte de lo esperado y un encarecimiento de los precios de la energía en aquellos sectores con poca competencia".

LA VOLATILIDAD INFLUYE TEMPORALMENTE EN LA DINÁMICA MONETARIA.

Jean Claude Trichet señaló que en la actual situación la volatilidad puede ejercer temporalmente una considerable influencia sobre la dinámica monetaria.

En concreto, el presidente del BCE indicó que la expansión monetaria y crediticia son un punto de tensión alcista para los riesgos en la estabilidad de precios a medio y largo plazo, por lo que aseguró que seguirán "muy de cerca" su evolución dado el nivel de incertidumbre existente.

"Hemos tomado la decisión de poner en marcha una política más a largo plazo de refinanciación con tipos variables y sin cantidades fijadas de antemano", afirmó.

"Estoy muy orgulloso de todo lo que hemos hecho frente a los mercados financieros porque tomamos las decisiones cuando era necesario. Aunque esto no debe mezclarse con la política monetaria, puesto que se trata de cosas aparte", añadió.

Asimismo, en respuestas a los periodistas, el máximo dirigente del instituto emisor europeo descartó discutir la posibilidad de una reducción de los tipos marginales.