MÉRIDA, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los presidentes de Caja de Extremadura y Caja de Badajoz, Jesús Medina y José Manuel Sánchez Rojas, respectivamente, coincidieron hoy en el planteamiento de que serán los nuevos responsables de sus respectivas entidades, y no ellos que abandonarán próximamente sus responsabilidades, los que deberán decidir sobre la "reestructuración" del sistema financiero español que se producirá como consecuencia, indicaron, de la actual crisis económica "mundial".
En rueda de prensa hoy en Mérida preguntados por los medios sobre las declaraciones de la ministra Elena Salgado la pasada semana a través de las cuales ésta instaba a la unión de las cajas de ahorro por considerar que existía una "sobredimensión" del número de entidades en España, ambos dirigentes coincidieron también en que ante dicha "reestructuración" que "tiene que haber" como consecuencia de la crisis "caben muchas opciones".
En concreto, en referencia a la posible fusión de cajas extremeñas, el presidente de Caja de Extremadura afirmó que no le corresponde a él sino a los que serán sus sucesores decidir sobre "cómo, de qué manera y en qué forma se buscan alianzas, o agrupaciones, o fusiones con las extremeñas o con otras distintas" para que las entidades puedan hacer frente a los "problemas" que pudieran plantearse en el futuro, "si es que se plantean", dijo.
En todo caso, Jesús Medina se mostró convencido de que como consecuencia de la crisis económica, el mapa financiero y bancario español sufrirá una "reestructuración" que afectará, dijo, a "todas" las entidades financieras, en concreto, bancos, cajas de ahorro y cooperativas de crédito.
Ante dicho panorama, y ante el "aumento considerable" de la morosidad que se está registrando, recordó que el Ministerio de Economía y Hacienda indica que "cuando haya problemas de esta naturaleza se busquen soluciones privadas, buscando alianzas, fusiones entre cajas de ahorro de la misma región o de otra distinta, en función de las propias necesidades que puedan tener".
Asimismo, Medina añadió que en el caso de que no existan "posibles soluciones privadas" las entidades que lo necesiten podrán acudir al Fondo de Garantía de Crédito así como a una fondo de reestructuración del sistema bancario español que creará el Gobierno central y que, según dijo, "permitirá dar ayuda para hacer posible la solvencia de las entidades financieras".
De igual modo, defendió que el objetivo final es que el sistema financiero español se vea "reestructurado de una manera distinta" en cuanto al número de entidades financieras existente en el país (bancos, cajas de ahorro y cooperativas de crédito), para que al final el resultado sea que "el sistema bancario español siga siendo solvente, eficiente y que pueda ser competitivo como lo es el del resto del mundo".
En su intervención ante los medios, en rueda de prensa tras la firma de la aportación que las cajas realizarán al Plan Extraordinario de Apoyo al Empleo Local, Medina se refirió también al "proceso de recesión económica" que como consecuencia de la crisis ha provocado pérdidas de empleos en "muchas" empresas de diversos sectores, así como un incremento "considerable" de la morosidad que "afectará" a las cuentas de resultados y a los volúmenes de negocios de las entidades financieras.
En esta línea, apuntó que según datos del Fondo Monetario Internacional, un 20 por ciento de entidades financieras podría verse afectado por la actual situación de "morosidad" y "falta de solvencia".
CAJA DE BADAJOZ
Por su parte, el presidente de Caja de Badajoz, José Manuel Sánchez Rojas, coincidió con su homólogo de Caja de Extremadura en la idea de que deberán ser sus sucesores en la presidencia de sus respectivas entidades los que tengan que decidir sobre la "reestructuración" y el "ajuste" que "tiene que haber" en el sistema financiero español como consecuencia de la crisis, y para acometer la cual --dijo-- "caben muchas opciones".
Dijo estar "convencido" de que "seguro" los responsables futuros de la cajas (la de Extremadura y la de Badajoz) "sabrán tomar la mejor decisión para que el sector financiero extremeño sea lo más fuerte y competitivo posible". "La historia se está escribiendo en este momento y es un momento apasionante", indicó.
En cualquier caso, respecto a una posible fusión, apuntó que las dos cajas (de Extremadura y de Badajoz) "por separado" han prestado un "buen servicio financiero" a los extremeños y han realizado una "gran" obra social en forma de equipamiento público, educativo, para discapacitados, etc.
"Las dos por separado, afortunadamente, tienen una buena situación de solvencia, una buena situación económica para resistir, pero eso no quiere decir que en el futuro, que va a ser complicado en este sector, no haya que tomar las medidas oportunas para ser lo más fuerte posible, para competir, para poder prestar el servicio financiero que los extremeños demandan en las mejores condiciones, y hacer una mejor obra social", sentenció Sánchez Rojas, quien añadió que "eso seguramente pase por una reestructuración que puede afectar a las cajas de ahorro, a las cajas rurales".
En esta línea, sostuvo que "todos" los analistas "coinciden" en que hay un "exceso de capacidad" en el sistema financiero español "como lo hay a nivel mundial en tantos otros sectores de la actividad económica".
Afirmó así que la crisis "va a traer como consecuencia" en "todos los sectores", principalmente en aquellos "más afectados" por la misma, aunque resaltó al mismo tiempo que el sistema financiero español "es muy sólido" y está "muy bien regulado" por las autoridades competentes.
Sobre este respecto, afirmó que el sistema financiero de España "ha resistido bien" a la crisis, "mucho mejor que otras entidades de otras partes del mundo", aunque advirtió que el sistema "tiene que prepararse para el escenario post-crisis" ya que "las cosas no podrán ser como son ahora".
"Lo mismo que hay ajustes en el sector automovilístico e inmobiliario lo va a haber en el sector financiero", aseveró Sánchez Rojas, quien añadió que "lo mismo que en España hay una oficina bancaria por cada 1.000 habitantes y en otras partes de Europa ese ratio es el doble tiene que haber un ajuste".
Finalmente, apuntó que dicho "ajuste", tal y como "coinciden todos los analistas", deberá realizarse "de la manera que sea lo menos traumático para el conjunto de los que viven del sector financiero, para la sociedad en sí y para las arcas públicas".
