Economía/Finanzas.- (Amp)Bruselas prohíbe la fusión entre Deutsche Börse y NYSE porque crearía un monopolio en derivados

Actualizado: miércoles, 1 febrero 2012 12:49

BRUSELAS, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Comisión Europea ha prohibido este miércoles la fusión entre los operadores bursátiles Deutsche Börse y NYSE Euronext alegando que crearía prácticamente un monopolio en las transacciones en bolsa, a escala internacional, de productos financieros derivados europeos, según ha informado en un comunicado.

El veto de Bruselas choca con la decisión de las autoridades de Estados Unidos, que sí habían autorizado la fusión al no apreciar dificultades para la competencia.

Juntas, las dos bolsas controlan más del 90% de las transacciones mundiales de derivados europeos. La investigación de Bruselas ha puesto de relieve que los posibles nuevos rivales tendrían pocas opciones de entrar en el mercado con suficiente potencia como para plantear una amenaza competitiva seria a la entidad fusionada.

Para tratar de corregir estos problemas, las compañías ofrecieron a Bruselas vender algunos activos y permitir el acceso a su cámara de compensación a algunas categorías de nuevos contratos. Pero el Ejecutivo comunitario ve insuficientes estas medidas para resolver las preocupaciones identificadas.

"La fusión entre Deutsche Börse y NYSE Euronext habría provocado un cuasi-monopolio en los derivados financieros europeos en todo el mundo", se ha justificado el vicepresidente de la Comisión y responsable de Competencia, Joaquín Almunia.

"Estos mercados están en el corazón del sistema financiero y es crucial para el conjunto de la economía europea que sigan siendo competitivos. Tratamos de encontrar una solución, pero los remedios ofrecidos se quedaron cortos a la hora de resolver las preocupaciones", ha explicado Almunia.

Eurex, operado por Deutsche Börse, y Liffe, operado por NYSE Euronext, son los dos principales mercados del mundo para derivados financieros basados en activos europeos. Compiten de forma directa y cada uno de ellos es para el otro el principal rival, según el examen de Bruselas.

La fusión, insiste el Ejecutivo comunitario, habría eliminado esta competencia mundial y creado prácticamente un monopolio, lo que perjudicaría significativamente a los usuarios de derivados y a la economía europea en su conjunto.

La desaparición de una presión competitiva real en el mercado provocaría, prosigue la Comisión, que los clientes ya no pudieran beneficiarse de la competencia de precios. Ello tendría consecuencias negativas también para la innovación, para las pymes y también para las empresas de mayor tamaño.