SALAMANCA, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
Caja Duero prevé cerrar el presente año con un beneficio neto de 130 millones de euros, un 30 por ciento más que en 2006, según estimó la Asamblea General de la caja que aprobó hoy en Salamanca las directrices básicas del plan de actuación de la entidad y los objetivos marcados para el año 2008.
En concreto, en la reunión, presidida por Julio Fermoso, se hizo balance del ejercicio económico, que coincide con el primero del Plan Estratégico 2007-2010, en el que se espera un beneficio neto de 130 millones de euros, un 30 superior al del ejercicio anterior. "Esta cifra procede en su totalidad del negocio típico generado por la caja y su grupo, sin recurrir a beneficios extraordinarios ni atípicos", explicaron a Europa Press fuentes de la caja.
La Asamblea General de Caja Duero también tuvo conocimiento de las principales líneas de actuación previstas en el próximo ejercicio, en el que se ha planteado una contención del crédito, en la misma línea planteada durante 2007, una "política restrictiva de la inversión" que, según aseguraron las mismas fuentes, no supondrá obstáculos para la financiación de aquellos proyectos empresariales considerados viables.
Caja Duero también apostará por una continuidad en la política de crecimiento en depósitos, la captación de nuevos clientes, el control de la morosidad, y la mejora en los ratios de eficiencia y rentabilidad. Paralelamente, se continuará en el plan diseñado de apertura de oficinas en Valladolid, principalmente, y fuera de Castilla y León, donde ya se dispone de la mitad de las sucursales.
Las mismas fuentes informaron de que este Caja Duero ha obtenido un "importante crecimiento" de sus resultados netos del 30 por ciento, "doblando en cuatro años el beneficio de 2003, y doblando también la cantidad destinada a Obra Social, que ha ascendido el año que ahora finaliza a 35 millones de euros".
LÍDER EN EL MERCADO NACIONAL.
En línea con las previsiones establecidas por el equipo gestor de la entidad ya a mediados de 2006, la caja redujo voluntariamente la inversión crediticia a cifras cercanas al 7 por ciento, "apostando por la captación de ahorros, segmento tradicional al que siempre se han dedicado las cajas y que había pasado a un segundo plano". En este sentido y según precisaron las mismas fuentes, Caja Duero ha sido líder a nivel nacional en el mercado nacional, retribuyendo los depósitos de los ahorradores con los mayores intereses, demostrando su dinamismo comercial.
La expansión de la entidad también tuvo un hito destacado en 2007 con la puesta en marcha de la oficina de representación en Varsovia (Polonia), dentro de la estrategia puesta en marcha de acompañar a los empresarios españoles en su desembarco en la Europa del Este, una zona de importantes crecimientos económicos.
PREFERENCIAS SOBRE OBRA SOCIAL.
Asimismo, y dentro del capítulo de Obra Social, la caja pulsó la opinión de los clientes, en busca de sus preferencias sobre las actividades sociales y culturales que debían estimularse. Después de casi 50.000 consultas entre las personas que debían renovar sus tarjetas de crédito, se ha obtenido una respuesta muy igualitaria, con un 25 por ciento de titulares que apostaron por las actividades culturales, un 21 por ciento para ocio/deporte, un 14 por ciento para formación/empleo, un 18 por ciento para patrimonio y un 22 por ciento para el ámbito social/cooperación.
