Recomienda aumentar el control sobre el absentismo en los días previos a la huelga
MADRID, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -
CEOE y Cepyme han distribuido un documento de observaciones y recomendaciones entre sus organizaciones miembro de cara la huelga general del 14 de noviembre, en la que apoyan "la actitud de los empresarios que no sean pasivos" ante la convocatoria.
El texto, al que ha tenido acceso Europa Press, aconseja, por ejemplo, poner "atención, especialmente, sobre el control del absentismo en los días previos a la huelga".
Además, la patronal recuerda que la dirección de la empresa, en colaboración con los representantes de los trabajadores, habrá de designar las personas precisas para cubrir los servicios mínimos, y avisa de que "en el supuesto de falta de cooperación de los representantes de los trabajadores, circunstancia de la que debería quedar constancia, podrá hacerse la designación directamente por la empresa".
Asimismo, el documento recalca que los piquetes deben limitarse a tareas puramente informativas o de propaganda y que "cualquier acto que desborde este cometido, como sucede en la práctica, convierte la acción del piquete informativo en ilegal".
UNA HUELGA ES "RECHAZABLE SIEMPRE".
Por otro lado, CEOE-Cepyme subraya que en tanto la huelga general va en contra de la reforma laboral o el decreto de recortes del mes de julio, "tiene lugar contra legítimas decisiones legales, de las que ha sido autor el Gobierno de la nación y refrendadas por las Cortes Españolas".
La patronal se vale de esta lectura para calificar el paro general convocado de "político" y añade que "CEOE nunca va a avalar la huelga general, y menos aún aquélla que intenta modificar varias decisiones del Pleno del Congreso de los Diputados".
"El ejercicio de la huelga general y el riesgo de violencia y daños que conlleva es rechazable siempre, tanto cuando va dirigida contra los intereses empresariales directos, como cuando tiene como motivación principal el poner en tela de juicio el ejercicio de la soberanía nacional por medio del poder legislativo", añade.
ACUSAN A LOS SINDICATOS DEL RETRASO EN CONVENIOS.
Por otro lado, CEOE-Cepyme argumenta en el documento que la huelga general "afecta también al proceso de diálogo social", puesto que se dirige también contra un supuesto bloqueo de los convenios colectivos por parte de la patronal.
En su defensa, la Confederación argumenta que el segundo acuerdo interconfederal sobre negociación colectiva (II AENC), firmado por los agentes sociales en febrero y que constituye la guía de estos convenios, "debe ser cumplido por ambas partes en las mesas de negociación y no sólo por el banco empresarial".
En un paso más, la patronal admite que "se aprecian estancamientos" en la negociación colectiva, que achaca a la difícil situación de las empresas, "pero también a la pretensión sindical de utilizar la negociación colectiva como lugar de confrontación contra la reforma laboral y sus intentos de exceder lo convenido en el II AENC".
