Economía/Laboral.- (Ampl.) El Gobierno seguirá actuando como "estime necesario" tras el fracaso del diálogo social

Actualizado: jueves, 27 agosto 2009 17:37

Corbacho exige a la patronal que abandone sus "posturas intransigentes" y rechaza abordar la reforma laboral


MADRID, 27 Ago. (EUROPA PRESS) -

El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, advirtió hoy que el Gobierno adoptará "todas las medidas que estime necesarias" en materia laboral pese a la falta de acuerdo con patronal y sindicatos y no permitirá que el fracaso del diálogo social "paralice" la acción política contra la crisis y el paro y garantizar la protección social.

Durante su comparecencia extraordinaria ante la Comisión de Trabajo e Inmigración del Congreso de los Diputados, Corbacho señaló que el Gobierno "sigue apostando" por el proceso de diálogo y concertación social como fuente de las políticas en esta materia, aunque advirtió que deben desparecer "los condicionantes y posturas intransigentes" que impidan alcanzar puntos de acuerdo, en referencia a la postura de la patronal.

En este sentido, pese a recalcar que los mayores avances en materia sociolaboral provienen "siempre" del diálogo social, su interrupción no puede agotar los márgenes de actuación del Ejecutivo para superar la actual crisis.

Corbacho insistió en culpar a las exigencias "inasumibles" de las organizaciones empresariales (CEOE y Cepyme) de la ruptura de las negociaciones el pasado 20 de julio, si bien aseguró que el Gobierno asume su "plus de responsabilidad" en todo proceso de diálogo con los agentes sociales.

Asimismo, destacó que si hace un mes había expectativas de acuerdo, fue porque tanto gobierno como patronal y sindicatos estaban convencidos de ello, pero la postura de la patronal reclamando una rebaja de cinco puntos de las cotizaciones sociales a las empresas (con un coste estimado de 18.000 millones de euros para la Seguridad Social), frente a la rebaja del 1,5% ofrecida por el Gobierno.

"RUPTURA UNILATERAL" POR PARTE DE LA PATRONAL

Esta reclamación, junto a la exigencia de una "profunda reforma laboral", lo que supuso de facto una "ruptura unilateral" del diálogo que provocó una "cierta frustración" en la opinión pública "y no ha contribuido a generar confianza".

El ministro se mostró convencido de que la mayoría de los ciudadanos han valorado "positivamente" el esfuerzo realizado por el Gobierno en aras de un buen acuerdo, en el contexto de una crisis que "ha evolucionado a velocidad de vértigo" y afectado la concreción de la agenda de debate.

Corbacho reconoció que de las medidas puestas en marcha por el Ejecutivo para contener la caída del paro "unas han sido más exitosas que otras", pero defendió que el fondo de inversión local dotado con 8.000 millones para obra pública "ha beneficiado a 400.000 personas". Asimismo, recordó que actualmente 2,6 millones de personas "están bajo el paraguas de la protección del Estado", que gasta más de 2.600 millones de euros al mes en prestaciones.

UNA REFORMA LABORAL NO RESOLVERÁ EL PARO

Respecto a la reforma laboral, Corbacho destacó que los culpables de la crisis no son los trabajadores, por lo que ellos no deben ser los que carguen con sus consecuencias. "Ya lo están pagando, y otros se dejarán menos en el camino que los que han perdido su empleo", lamentó Corbacho, quien reiteró que precisamente es la gran flexibilidad del mercado laboral español es la que explica que en un año se hayan destruido más de un millón de puestos de trabajo.

"Esto no se resuelve con una reforma laboral", incidió antes de asegurar que el ajuste en la economía española no se puede entender al margen del patrón del crecimiento de la economía española basado en la construcción, que ha provocado el "grueso mayoritario" del aumento del paro. "No lo digo yo, lo dicen las cifras", arguyó.

"TENEMOS DEMASIADAS BONIFICACIONES"

A su juicio "crear empleabilidad" pasa por apostar "decididamente" por el sector público y acabar con la temporalidad, y no por abaratar el despido y rebajar las cuotas de la Seguridad Social, ni siquiera por encima de un porcentaje del 2%.

Además, abogó por hacer una "reflexión" sobre el papel de las bonificaciones a las empresas. "Tenemos demasiadas bonificaciones, que por sí mismas no generan empleo", advirtió Corbacho, que abogó por estudiar de qué manera se pueden reorientar para generar puestos de trabajo.