Economía/Laboral.- Diputados de Izquierda Socialista mantienen discrepancias con la reforma, pero votarán con el PSOE

Hemiciclo del Congreso
EP
Actualizado: jueves, 2 septiembre 2010 19:48


MADRID, 2 Sep. (EUROPA PRESS) -

Los tres diputados de la corriente Izquierda Socialista del PSOE, los madrileños Manuel De la Rocha y Juan Antonio Barrio de Penagos y el granadino José Antonio Pérez Tapias, respetarán la disciplina del Grupo Socialista y su decisión de voto sobre el proyecto de ley de reforma laboral que el próximo jueves afrontará su trámite final ante el Pleno del Congreso de los Diputados con el debate de las enmiendas introducidas por el Senado.

Barrio de Penagos, portavoz de esta corriente, ha asegurado a Europa Press que, pese a mantener sus discrepancias con el texto, que ya expresaron cuando se presentó el decreto ley que dio origen a esta norma, respetarán la "decisión mayoritaria" del Grupo Socialista.

El debate del próximo jueves será la única ocasión para que los 350 diputados se pronuncien de manera individual, a través de sus votos, sobre las modificaciones añadidas a la norma por la Cámara Alta, si bien sólo cuatro de ellas fueron introducidas con el rechazo socialista, tres de ellas del PNV y una del BNG.

Tanto Barrio como de la Rocha consideran que, pese a los cambios en el texto, "nada ha sucedido" que les hagan replantearse el sentido de su voto, mientras que Pérez Tapias ha explicado que han llevado el debate entre los diputados socialistas "hasta donde se ha podido" y todavía no renuncia a que se "introduzcan mejoras".

GUTIÉRREZ NO SE PRONUNCIA

El diputado socialista y ex secretario general de Comisiones Obreras, Antonio Gutiérrez, fue el único que rompió la disciplina de voto de su grupo en la votación del decreto ley el pasado 22 de junio, una posición que los diputados de Izquierda Socialista respetan pero no compartirán, a pesar de su postura crítica con la reforma.

En cualquier caso, Gutiérrez, presidente de la Comisión de Economía y Hacienda de la Cámara Baja, aún no ha avanzado cuál será su posición en el debate del próximo jueves y confirmar si volverá a optar por la abstención, una decisión por la que ya fue sancionado por el Grupo Socialista.

En cualquier caso, al tratarse de una votación de enmiendas y no del texto global, el PSOE no tendría que volver a verse en la tesitura de sacar adelante la norma en solitario y sólo con 168 de los 169 votos de los que dispone, como ocurrió con hace dos meses y medio.