Economía/Laboral-Gobierno vasco cree que la brecha entre sindicalismo nacionalista y estatal dificulta el diálogo social

Actualizado: martes, 29 agosto 2006 14:46

BILBAO, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Justicia, Empleo y Seguridad Social del Gobierno vasco, Joseba Azkarraga, aseguró que "la profunda brecha" entre las organizaciones sindicales de "obediencia nacional vasca y las de ámbito estatal" es una de las causantes de las dificultades del diálogo social. En este sentido, consideró "simplista" adjudicar a la Administración, a los empresarios o a alguna de las organizaciones sindicales "la responsabilidad única" de los desencuentros en las relaciones laborales.

El consejero explicó en una entrevista en la revista Hermes, recogida por Europa Press, que "ni las cuestiones en las que pueden coincidir, aunque sólo fuere a los efectos de denuncia", animan a los sindicatos nacionalistas y estatales "a comparecer juntos".

Azkarraga censuró la existencia de esta relación entre la falta de "un verdadero diálogo social" y las distintas posturas de los dos bloques sindicales, como demuestran, a su entender, los "habituales" pronunciamientos en la prensa, que piden al Gobierno ese diálogo, "mientras las estrategias sindicales sobre cómo hacer las cosas, divergen".

Además, negó que la división sindical beneficie a los empresarios y añadió que la falta de un diálogo social "eficaz" perjudica "a las relaciones laborales y, por tanto, no es bueno para nadie".

"Todos tenemos que ser conscientes de que la histórica división sindical en nuestro país es uno de los obstáculos más importantes para el acercamiento de posiciones. Que debamos contar con ella no significa que nos resignemos a no poner los medios para superarla, pero ocurre que se trata de una división aun más profunda que la que vivimos en el campo político" puntualizó.

Azkarraga opuso a esta división la reciente foto entre los secretarios generales de los sindicatos UGT y LAB, respecto a la que deseó que represente "algo más que una simple reseña grafica y que se inicie un camino de relaciones abiertas".

ACUERDOS EN MAYORIA

Ante el "recurso fácil" de "mirar al Gobierno vasco y centrar en él la exigencia", el Consejero defendió que la Administración "jamás ha rehuido el compromiso". Recordó que durante la pasada legislatura se apostó por apoyar acuerdos firmados por la totalidad de la representación sindical y empresarial o, cuando menos, por las mayorías suficientes para que éstos tuvieran eficacia general.

"Entendemos que los sindicatos representan legítimamente a los trabajadores. Las estrategias que utilicen para defender los intereses de quienes depositan en ellos su confianza, no es algo que deba valorar el Gobierno", comentó.

El Ejecutivo vasco, planteó, busca un acercamiento entre sindicatos y empresarios conforme a dos premisas "fundamentales": respeto a la autonomía de las partes y reconocimiento de las mayorías. "Todo ello, con la utilización de la negociación colectiva como herramienta", añadió.

Azkarraga explicó que este acercamiento ha llevado a su Departamento a desarrollar un programa de encuentros con los agentes sociales, de los que ya se ha finalizado la primera fase, con una "coincidencia sobre las cuestiones más urgentes y fundamentales a tratar", pero con diferencias sobre el análisis de las causas y las acciones necesarias.

En todo caso, continuó, la Administración ha percibido "un compromiso para abordar una nueva ronda de conversaciones", fundamentada en distintas comisiones que abordarán la siniestralidad laboral, el análisis de la futura Ley Vasca de Empleo, la temporalidad laboral y la situación de las transferencias del ámbito laboral, así como la reflexión sobre el Marco Vasco de Relaciones Laborales.