Critica que el Gobierno delegue toda decisión sobre el empleo en el diálogo social
MADRID, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
El ex secretario general de UGT, Nicolás Redondo, afirmó hoy que no le gusta la política económica del Gobierno, en especial la última reforma fiscal, y pidió al Ejecutivo que sea "más audaz y más exigente" con la banca y las cajas de ahorro para que fluya el crédito.
Además, se mostró en desacuerdo con que el Gobierno no adopte ninguna decisión que afecte a la creación de empleo si no hay acuerdo con los sindicatos. "Es una teoría que nunca he compartido, porque si todo acuerdo tiene que pasar por los sindicatos y la CEOE, ¿en qué se diferencia un Gobierno de derechas de uno de izquierdas?", planteó.
En declaraciones a Telemadrid recogidas por Europa Press, Redondo defendió, por el contrario, la gestión de los sindicatos. "Básicamente, estoy de acuerdo con los comportamientos de los sindicatos", indicó.
En este sentido, tampoco compartió la idea de que las organizaciones no convoquen una huelga general por las subvenciones que reciben del Estado, sino que, a su juicio, "no hay motivos para una huelga general".
"Anteriormente hemos ido a huelgas generales porque ha habido agresiones reales a las condiciones de los asalariados", argumentó para añadir que "los sindicatos, en cuestiones de mercado laboral, están medianamente satisfechos con la política de Zapatero".
Sobre la reforma laboral que proponen los empresarios, el ex secretario general de UGT comentó que "en estas disyuntivas cíclicas siempre optamos por lo más fácil, que es abaratar el despido, cuando lo que hace falta ahora es una gran imaginación, sentarse sindicatos y empresarios a trabajar y, si hay necesidad de reformar el mercado de trabajo, hacerlo, pero sin que consista siempre en lo mismo". "Hay que buscar soluciones al paro, pero abaratando y despidiendo no se soluciona", apostilló.
Por otro lado, Redondo afirmó que el hecho de que se diga del secretario general de UGT, Cándido Méndez, que es el verdadero vicepresidente del Gobierno "es una maldad, más que nada".
