MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
El catedrático de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la facultad de Derecho de Esade, Salvador del Rey, ha presentado un balance positivo del primer año de la reforma laboral, pero ha apostillado que los verdaderos efectos del cambio de modelo que supone la reforma se deberán notar cuando España empiece a crecer económicamente.
En un comunicado, el profesor asevera que las medidas de flexibilidad internas han permitido una menor destrucción de puestos de trabajo y una mayor competitividad de las empresas españolas en plena crisis.
Salvador del Rey ha destacado, por otro lado, que sería importante revisar las medidas de protección a los mayores de 50 años para que no produzcan el efecto contrario al deseado y dificulten su contratación, fomentar nuevas medidas y líneas de contratación, y simplificar la excesiva juridificación de los procesos de despidos colectivos.
PÉRDIDA DE DERECHOS LABORALES
De su lado, Bernat Antràs, profesor de la facultad de Derecho de Esade y socio director del Bufet 'Antràs Advocats Associats' cree que las medidas de flexibilidad interna introducidas por la reforma laboral pueden ser oportunas en un momento en que las empresas españolas necesitan ganar rápidamente competitividad, reducir márgenes, precios, costes y mantener, en muchos casos, su capacidad en recursos humanos.
Pero, según el profesor, no hay que olvidar que la reforma supone una "devaluación de los derechos laborales". Es en este sentido, para Antràs "la reforma laboral debe ser una medida coyuntural, ya que si se mantiene en tiempos de mejora económica será insostenible". Por último, Bernat Antràs apuesta por devolver el protagonismo a la negociación colectiva y al acuerdo en materia laboral una vez superada la actual crisis económica.
