Izar.- Carbonero urge a la Junta a que "presione" al Gobierno central para que haya una "solución de inmediato"

SEVILLA 8 Jul. (EUROPA PRESS) -

El secretario general de CC.OO-A, Francisco Carbonero, dijo que el conflicto de los trabajadores de astilleros "tiene que tener una solución de inmediato", por lo que pidió a la Junta de Andalucía que "presione" al Gobierno central y le traslade que "la pervivencia de la industria naval en Sevilla pasa por la viabilidad del proyecto industrial" de las empresas que optan a comprar las factorías civiles de Izar.

En declaraciones a Europa Press, Carbonero defendió que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), después del rechazo de los trabajadores al preacuerdo laboral, tiene que "mover ficha, modificar posiciones y dar garantías de viabilidad y de futuro al proyecto industrial, que es lo que nos genera incertidumbre".

Según precisó, el principio de acuerdo, que fue suscrito por CC.OO y UGT, "era un instrumento válido, pero es cierto que hay cuestiones que pueden generar incertidumbre si no se redactan y se concretan de otra manera".

"Se lo hemos planteado a la SEPI, no ha dado respuestas y lógicamente nos está llevando a convocar nuevamente movilizaciones", lamentó el dirigente sindical. De hecho, los operarios de la planta sevillana cortaron el pasado jueves durante 15 minutos el Puente del V Centenario y prevén celebrar el próximo miércoles una reunión para fijar un calendario de protestas.

Carbonero, que subrayó que mantener el sector de la construcción naval "será una cuestión irrenunciable" para CC.OO, hizo un llamamiento a que el Gobierno andaluz "presione" para que la SEPI dé "concreción" y garantice que "las empresas que optan a quedarse con este proyecto industrial tienen que dar seguridad en el empleo, lo que vendrá dado por la viabilidad del proyecto, los recursos que van a tener y las inversiones que van a hacer".

"Estas cuestiones no se ha puesto encima de la mesa", agregó el secretario regional de CC.OO para justificar que el sindicato rechace ahora el preacuerdo suscrito y reclame el cumplimiento de los acuerdos de diciembre de 2004. Según explicó, "el cambio en CC.OO ha sido esa incertidumbre, ya que en los días que han pasado desde la firma del preacuerdo no ha habido una concreción de las cosas que interpretamos que se recogían en el acuerdo".