Economía/Comercio.- La OMC buscará hoy en Ginebra fórmulas para desbloquear la Ronda de Doha

Actualizado: miércoles, 7 febrero 2007 9:08

Washington estudia una reforma de sus subsidios agrarios que no satisface a algunos de los principales socios

GINEBRA, 7 Feb. (EP/AP) -

Representantes de los 150 países miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC) se reunirán hoy en Ginebra para calibrar su grado de compromiso y los posibles avances en la búsqueda de un acuerdo que desbloquee la Ronda de Doha, suspendida desde mediados del año pasado.

La revitalización de las negociaciones parece depender ahora de un solo país, de Estados Unidos, y de su respuesta a dos cuestiones importantes. Por un lado, la OMC aguarda a que el Congreso amplíe la 'fast track', que permite al presidente del país, George W. Bush, aprobar acuerdos internacionales sin enmiendas parlamentarias. Por otro lado, el Gobierno norteamericano podría aplicar una remodelación de su sistema de subsidios agrarios a la que se oponen socios como Brasil o la UE.

"El Congreso tendrá en cuenta las conversaciones sobre libre comercio", aseguró la negociadora estadounidense ante la OMC durante la segunda legislatura de Bill Clinton, Rita Hayes. "Pienso que todo el mundo coincide en la conveniencia de un nuevo acuerdo comercial, pero el problema para el Congreso radica en cómo protegerá este acuerdo los intereses de los trabajadores estadounidenses", añadió.

La Ronda de Doha, iniciada en 2001, quedó bloqueada en Ginebra el año pasado, después de que los principales socios de la OMC fueran incapaces de llegar a un acuerdo acerca de las dos materias propuestas en la reunión celebrada a finales de 2005 en Hong Kong, esto es, los servicios y la agricultura.

Uno de los asuntos que más enfrentan a Estados Unidos y a la UE son los subsidios que la Administración norteamericana paga a sus agricultores. Los países en desarrollo se quejan de que estas prestaciones dificultan la venta de sus productos en Estados Unidos, y la UE dice que no abrirá su mercado a la carne estadounidense hasta que no se reduzcan los subsidios.

Hayes, que se encuentra en Ginebra como representante de una firma de abogados estadounidense que sigue de cerca las conversaciones de la OMC, consideró que la próxima reunión de la organización internacional podría provocar un cambio de aires en el Congreso estadounidense.

La Administración Bush se ha ofrecido a recortar los programas de subsidios a los agricultores en 18.000 millones de dólares (13.900 millones de euros) en los próximos cinco años. Esta posición genera reticencias entre los demócratas, que controlan el Congreso y que han criticado los borradores anteriores sobre la OMC al considerar que no se protegía lo suficiente a los trabajadores estadounidenses.

MENOS EMPLEO EN MANUFACTURAS.

Desde que Bush llegó al poder en 2001, uno de cada cinco empleos de las manufacturas en Estados Unidos han desaparecido, lo que supone más de 2,9 millones de empleos. Los sectores más dañados han sido los fabricantes de automóviles y las empresas textiles.

La Administración Bush también quiere resolver sus desajustes con China, que le han conducido a situar en niveles récord su déficit comercial, y ha presentado dos quejas formales contra el país asiático ante la OMC en apenas un año.

En Estados Unidos, los republicanos han tendido tradicionalmente a prestar más apoyo a los empresarios, y los demócratas a hacer lo propio con los trabajadores. En las negociaciones sobre libre comercio, la representante de Estados Unidos, Susan Schwab, ha apoyado un acuerdo ambicioso, pero ha defendido al mismo tiempo las prestaciones que su Gobierno ofrece a los agricultores y, en especial, a los productores de maíz, soja, trigo y algodón.

Antes de recortar sus ayudas, Washington quiere asegurarse de que Brasil, India y China hacen concesiones parecidas en ámbitos como los bienes industriales o los servicios.

PROPUESTA INSUFICIENTE.

Algunos de los socios internacionales han calificado de insuficiente la reforma de Estados Unidos de su sistema de prestaciones agrarias. "Hay algunos elementos positivos", señaló el embajador de Brasil ante la OMC, Clodoaldo Hugueney, "pero se queda lejos de la necesidad de un recorte real y sustancial". "No incluye los cambios que esperábamos", añadió.

Brasil, que ha tenido éxito en su pugna ante la OMC con Estados Unidos sobre el algodón, advierte de que la nueva regulación estadounidense no pasa aún de "un debate interno que durará meses". "Hay esperanza de que logremos un resultado aquí, en las negociaciones de Doha, y de que el resultado se incorpore a la legislación estadounidense", señaló.

RETICENCIAS DE LA UE.

La reforma agraria estadounidense también ha sido criticada por la UE por, entre otras cosas, no actuar sobre las distorsiones en los mercados de productos de consumo diario y del azúcar. Algunos analistas muestran además ciertas dudas acerca de un cambio de actitud en el Congreso, sobre todo cuando las negociaciones internacionales transcurren a un ritmo muy lento.

Los negociadores de la OMC aspiran a alcanzar un acuerdo antes de julio, cuando expire la 'fast track'. En todo caso, Bush anunció la semana pasada que pedirá al Congreso que renueve esta prerrogativa, lo que haría ganar tiempo al proceso.