El sucesor de Trinidad Jiménez se fija como retos prioritarios acompañar los Bicentenarios y recolocar la región entre las máximas prioridades de la UE
MADRID, 5 May. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno ha admitido hoy que la actual crisis económica y financiera "puede incidir en las inversiones e intereses económicos" de España en América Latina, por lo que se mantiene muy atento a la evolución de la situación y "en permanente contacto" con sus socios en la región con el fin de "asesorar y acompañar debidamente" a las compañías españolas "cuando sea necesario" y así lo soliciten.
Así se ha expresado el nuevo secretario de Estado para Iberoamérica, Juan Pablo Delaiglesia, en su primera comparecencia parlamentaria, ante la Comisión de Asuntos Iberoamericanos del Senado, donde se ha marcado como retos prioritarios de su mandato el acompañamiento a las celebraciones de los Bicentenarios de las independencias iberoamericanas y el regreso de América Latina al grupo de máximas prioridades de la UE.
Delaiglesia reconoció que se avecina una "situación más complicada" que la actual y que las perspectivas no son "particularmente halagüeñas para este 2009", cuando el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha previsto una caída del 1,5 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) de la región.
De ahí que el Ejecutivo esté determinado a "intensificar su labor de acompañamiento a las empresas, que son quienes mejor defienden sus intereses" propiciando una relación con los países donde estas compañías tienen intereses que permita "anticipar problemas donde se pueda y solucionarlos allí donde se produzcan".
EL PP DENUNCIA PASIVIDAD
En este sentido, y ante las críticas del senador del PP Dionisio García Carnero, que criticó la "actitud pasiva cuando no complaciente" del Gobierno cuando ha surgido algún problema en estos países, Delaiglesia defendió la "discreción" de la diplomacia, "que no está reñida", dijo, con una "claridad de acciones".
En su opinión, no constituye una buena táctica diplomática hacer declaraciones públicas sobre todas y cada una de las decisiones que adopten los poderes legislativos o los Gobiernos latinoamericanos para apoyar a las empresas que enfrentan problemas. "El mejor clima de relaciones es la mejor compañía para la solución de los problemas", zanjó, aunque señaló que el Gobierno se ha pronunciado cuando ha considerado que debía hacerlo.
Como ejemplo de que esta actitud del Gobierno está dando resultados, se refirió a los datos del Latinobarómetro de 2008, que reflejan que el Rey y el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, siguen figurando, junto al presidente brasileño, Luiz Inácio 'Lula' da Silva, "al frente de la lista de líderes mejor valorados" en Iberoamérica.
Delaiglesia quiso destacar el "compromiso" y la "voluntad de permanencia" que las empresas españolas han demostrado con Iberoamérica, lo que ha permitido que España se haya convertido en el segundo inversor en la región por detrás de Estados Unidos y con una inversión neta acumulada entre 1993 y 2008 de 130.000 millones de euros.
Resaltó asimismo que 31 de las 35 empresas que cotizan en el IBEX están presentes en la región "con importantes réditos para sus cuentas" pero también con cifras nada desdeñables de creación de empleo en esos países, con "cerca de 300.000 puestos de trabajo directos y más de 500.000 indirectos". En su gran mayoría, añadió, se trata de compañías "socialmente responsables".
Al margen de la crisis, el secretario de Estado fijó dos retos prioritarios para la política exterior hacia Iberoamérica "por razones temporales": el acompañamiento de las conmemoraciones de los Bicentenarios de las independencias iberoamericanas, que arrancarán el próximo 25 de mayo en Bolivia, y el regreso de América Latina al conjunto de máximas prioridades de la UE, aprovechando la presidencia española de la UE en el primer semestre de 2010.
Delaiglesia recordó que España abrirá estos actos de acompañamiento el próximo 11 de mayo con unas jornadas de reflexión en la Casa de América que estarán presididas por los Reyes y que pretenden iniciar los trabajos para la elaboración de una "agenda de futuro común" entre españoles e iberoamericanos, lo que implica el refuerzo de las Cumbres Iberoamericanas, cuya próxima edición arrancará el 1 de diciembre en Estoril (Portugal).
PÉRDIDA DE INTERÉS EN AMÉRICA LATINA
En cuanto a la UE, Delaiglesia advirtió de que con la ampliación de la UE al este de Europa se ha producido una "relativa pérdida de interés por América Latina" entre los socios comunitarios, lo que España intentará corregir durante su semestre de presidencia. Para ello, trabajará para hacer lo más atractiva posible la VI Cumbre UE-América Latina y el Caribe que le tocará organizar previsiblemente en mayo y que se centrará en la innovación, la tecnología y el desarrollo sostenible.
España también se ha marcado como objetivo que puedan firmarse durante su semestre de presidencia los acuerdos de asociación entre la UE con Centroamérica y los países de la Comunidad Andina que estén dispuestos a ello.
Durante la comparecencia intervino también por parte del PP el senador Manuel Fraga, quien alertó de la "dirección indigenista e integrista" que están tomando países como Venezuela, Bolivia, Ecuador y Nicaragua. El senador Dionisio García, que compartió su turno con Fraga, calificó la intervención del secretario de Estado de "discurso del buenismo" y denunció que el Gobierno no está haciendo de la política iberoamericana una política "de Estado" porque no la consensúa previamente con el resto de grupos.
García criticó el silencio del Gobierno español frente a ciertas situaciones de "avasallamiento" de los derechos y libertades en países iberoamericanos y, como ejemplo, se refirió al incendio de la casa de la mujer del ex presidente Víctor Hugo Cárdenas, en aplicación de la nueva Constitución boliviana, que permite la aplicación de la justicia indígena.
CUBA
Con respecto a Cuba, denunció los "nulos avances hacia la democracia" que se han producido en la isla y recordó que del grupo de 75 opositores detenidos en 2003, aún 55 permanecen en la cárcel y una docena está bajo prisión domiciliaria.
Delaiglesia replicó que España busca construir una relación de "confianza, presencia e influencia" con Cuba y advirtió de que quien no vea que en la isla se ha iniciado un proceso de dinámica de cambio "pagará el precio a corto plazo". En este sentido, recordó que todos los países latinoamericanos, la UE y Estados Unidos han respaldado y seguido la política de diálogo con Cuba que defiende España.
Algunos senadores como Alfredo Belda, de Coalición Canaria, o Joan Roch de CiU, se interesaron por los problemas que han encontrado compañías venezolanas en algunos de estos países, como Venezuela y Bolivia, mientras que el senador de IU Joan Josep Nuet sorprendió al decir que "nuevos liderazgos" en la región como el del brasileño 'Lula' da Silva o el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, le llenan "de satisfacción".
La senadora socialista María Emelina Fernández realizó una petición, que cuando se invite a la Cámara a visitar algún país de la región se dirija esa invitación expresamente a los miembros de la Comisión de Asuntos Iberoamericanos.
