Economía/Macro.- (Ampliación) Rato no cree que la crisis afecte "demasiado" al crecimiento mundial en 2007

Actualizado: lunes, 8 octubre 2007 15:09

Señala que los efectos sobre la economía real se dejarán ver en 2008 y que los riesgos son más importantes que hace seis meses

MADRID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -

El director gerente del FMI, Rodrigo Rato, afirmó hoy que es "poco probable" que las turbulencias crediticias afecten "demasiado" a las cifras de crecimiento de la economía mundial en 2007, dado que las decisiones de inversión, producción y consumo que afectan al PIB mundial fueron tomadas antes del estallido de la crisis a mediados del pasado mes de agosto.

Durante el discurso inicial del 'Foro España-Iberoamérica', organizado por la Cámara de Comercio de Madrid, Rato apuntó, en este sentido, que los efectos se sentirán especialmente en 2008, aunque se mostró optimista al considerar que serán "moderados".

Así, confió en que las cifras de crecimiento en 2008, aunque serán "ligeramente" inferiores a las registradas en 2006 y 2007, seguirán siendo "vigorosas" en términos históricos.

Por otro lado, el director gerente del FMI aseguró que las actuaciones de los bancos centrales, especialmente la reducción de los tipos por parte de la FED y la decisión del Banco Central de Japón de mantenerlos, fueron "sensatas" y, de hecho, permitirán limitar los efectos económicos de las turbulencias.

En cualquier caso, dijo que habrá que esperar unos meses para saber el impacto de las turbulencias en las "pérdidas totales de bancos e inversores" y llamó a estar atentos a las cifras de crecimiento de la economía mundial que publicará el FMI dentro de 10 días. La crisis crediticia es "un episodio importante, que aún no está totalmente resuelto", apostilló.

MÁS RIESGOS QUE HACE SEIS MESES.

Pese a que no quiso hacer pronósticos exactos, Rato reconoció que los riesgos para las economías internacionales son "más importantes que hace seis meses", y estimó que cuanto más se prolongue la crisis más importantes serán sus posibles efectos.

Así, el alto cargo del FMI también lanzó algunas advertencias, y apuntó que "los gobiernos deben ser conscientes de que la crisis tendrá efectos sobre la economía real".

Rato se mantuvo así en línea con las declaraciones realizadas en una entrevista que publica hoy el diario británico 'Financial Times', en las que advirtió que las restricciones del mercado del crédito obligarán a los gobiernos de todo el mundo a realizar cambios sustanciales sobre sus proyectos presupuestarios.

"Los responsables políticos no deberían pensar que estos problemas se quedarán en el escritorio de los banqueros", explicó Rato. "Los problemas se van a trasladar al sector real, a los presupuestos, esto es lo que seguimos diciendo a la gente", subrayó.

Respecto al impacto de la crisis del mercado del crédito, Rato subrayó que como comenzó en los mercados financieros de las economías más sofisticadas, el impacto será sentido de manera "mas rápida" en EE.UU. y en cierta medida en Europa y Japón antes que en el resto del mundo.

NO INTERVENCIÓN EN EL PRECIO DEL DÓLAR.

Por otro lado, Rato fue preguntado por si cabría tomar medidas para controlar una posible infravaloración del dólar, y reconoció que "desde el punto de vista de su comparación con sus intercambios comerciales ponderados, "(el dólar) estaría por debajo de su paridad", lo que, añadió, "no quiere decir que lo esté con respecto a cada una de las monedas".

Además, dijo, "el dólar es una moneda que flota libremente", de forma que "su precio lo fija el mercado, ya que las decisiones las toman inversores, compradores y vendedores".

IBEROAMÉRICA MIRA DE REOJO A LA CRISIS.

Por otro lado, Rato se refirió al posible impacto de la crisis crediticia sobre las economías Iberoamericanas. En este sentido, dijo, su mayor integración en la economía mundial en los últimos años tendrá como coste una mayor exposición a la influencia de este tipo de procesos globales.

Así, indicó que la contracción de la demanda en EE.UU. podría afectar a las exportaciones de esta región, situación que, por otro lado, se podría ver compensada por un crecimiento de los países emergentes como motor de la demanda.

Otro de los riesgos a los que se encuentran expuestos estos países es a una posible caída de los precios de las materias primas, proceso que Rato descartó por el momento. En este caso, precisó, las economías emergentes también están jugando un "importante papel".

En esta situación, Rato alertó de los peligros de una extensión de la crisis a los países emergentes, por cuanto, si esto ocurriera, --posibilidad que no consideró probable--, se produciría un encarecimiento del riesgo para todos estos países.

Entre los puntos fuertes de las economías latinoamericanas, Rato apuntó que sus mercados de crédito se han mantenido "indemnes" a la crisis abierta, ya que "su vulnerabilidad es mucho menor que en épocas anteriores", al tiempo que "la necesidad de financiación del sector público es más modesta".

Con todo, Rato aseguró que los gobiernos latinoamericanos "no pueden cruzarse de brazos". En este sentido, apuntó que deben aportar "más flexibilidad fiscal" y políticas sociales directas para luchar contra la pobreza y evitar "aumentos fuertes" del gasto público.

En el capítulo inversor, Rato se mostró preocupado por que la inversión se esté quedando "atascada" en el entorno latinoamericano. En este sentido, consideró necesario establecer un "entorno de rendimiento competitivo" y aportar mayor estabilidad a los mercados con el fin de incentivar la inversión privada. Asimismo, entendió importante orientar la inversión pública a sectores prioritarios, como la educación.