PEKÍN, 16 Ene. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Débora Altit) -
El regulador económico chino ha anunciado controles en los precios de un paquete de productos de consumo básico, que incluye los cereales, la carne, los huevos, el aceite o el gas licuado, según informa hoy la agencia oficial Xinhua, en lo que se ha interpretado como un movimiento destinado a controlar la inflación, que en noviembre pasado ascendió hasta un 6,9% y en diciembre se situó en el 6,5%.
"Las empresas deberán informar de su plan de aumento de precios 10 días laborables antes de la fecha en que planeen subirlos", ha ordenado, a través de una circular, la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma.
A cambio, la institución se compromete a ofrecer una respuesta en un plazo de siete días después de haber recibido la solicitud. El Gobierno se reserva el derecho para admitir o rechazar el incremento "basándose en si se encuentra en una escala de precios razonable", de acuerdo con Xinhua.
La comisión señala también que los grandes comercios tanto de venta al por mayor como al por menor deberán notificar cualquier aumento de precio siempre que el producto se encarezca más de 4% en un solo reajuste. La orden también se aplica cuando se produzcan aumentos superiores al 6% en diez días o del 10% en un mes.
Además, la comisión se reserva el derecho a exigir a las compañías que vuelvan a marcar el precio antiguo.
El pasado lunes las autoridades chinas anunciaron que tomarían medidas legales, económicas y administrativas para evitar la escalada de los precios. El control, según indicaron, afectaría a servicios como el agua, la electricidad, el combustible, el transporte público o las entradas a los destinos turísticos.
