Economía/Macro.- La confianza empresarial y el sentimiento económico de la UE caen en julio en la Eurozona y la UE

BRUSELAS, 31 Jul. (EUROPA PRESS) -

El Indicador del Sentimiento Económico (ESI) y el Indicador de Confianza Empresarial (BCI) se redujeron durante este mes de julio, según los datos que publicó hoy la Oficina de Estadística de la Comisión Europea (Eurostat).

Indican que la reducción del ESI fue de 1,7 puntos en toda la UE y de 0,7 en la eurozona mientras que el de la BCI fue de 0,18 puntos, en ambos casos con respecto al mes de junio.

En el caso del indicador de clima empresarial, Eurostat achaca el descenso -de 1,53 en junio a 1,35 en julio- a unas menores tasas de convergencia en sus cinco principales componentes, que resultaron "de algún modo deteriorados". Se refiere a los inventarios industriales de productos elaborados, la tendencia de la producción en los últimos meses, las expectativas de producción para los próximos meses, los pedidos totales y los pedidos de exportación.

Por su parte, Eurostat señala que el ESI disminuyó tanto en toda la economía de la UE como en la de la zona euro, a pesar de que señala que se mantiene en "niveles elevados".

Explica que la caída se debe principalmente al descenso de la confianza en los sectores industriales, de servicios y de la construcción, mientras que la confianza en el sector comercial y entre otros consumidores no varió.

En concreto en la zona euro, señala diferencias en el desarrollo de los distintos sectores, ya que, a diferencia del conjunto de la UE, la confianza mejoró en el comercio minorista y no varió en los servicios.

De manera individual por países, Eurostat cita a España como uno de los países donde más descendió el sentimiento económico, 0,9 puntos, superado por Italia (-1,0 punto) y Reino Unido (-6,6 puntos). En el extremo superior de la tabla, el indicador del sentimiento económico fue positivo en Francia(+0,7) y Polonia (+0,6).

Por sectores, los datos indican que la confianza industrial cayó tanto en la UE como en la zona euro, aunque se mantiene en "altos niveles" en los dos grupos de países. El descenso que se experimentó este mes se explica, según Eurostat, por el "deterioro" de sus tres componentes: las expectativas de la producción cayeron en un punto mientras que tanto las previsiones de compra como los inventarios sobre productos elaborados se redujeron en dos puntos.

Sin embargo, la oficina comunitaria señala que tanto en España como en Francia la confianza en el sector industrial permaneció sin cambios, mientras que se redujo en Alemania y Polonia en un punto y de manera más severa en Italia (-3 puntos) y Reino Unido (-9 puntos).

Por lo que respecta al sector servicios, el indicador de confianza cayo en la UE pero no varió en la zona euro. Sin embargo, Eurostat considera que con 20 y 21 puntos respectivamente, este indicador "se mantiene relativamente a alto nivel en el actual ciclo económico".

La caída en la UE se debió, explica, a un empeoramiento de los inventarios en la situación empresarial actual y a la reciente evolución de la demanda, en parte compensada por una mejora de la apreciación en la evolución esperada de la demanda.

En la zona euro, sin embargo, el empeoramiento de los inventarios se neutralizó por una mejora de la evolución que se espera de la demanda.

Por Estados miembros, la confianza en el sector servicios mejoró en Francia (+2), Italia (+4) y Polonia (+1), se mantuvo estable en Alemania y cayó en España (-1) y Reino Unido (-4).

En cuanto a la confianza de los consumidores, julio no experimentó ninguna variación, después de la corrección del mes de junio. Tanto en la UE como en la eurozona se mantuvo en el mismo nivel de mitad de 2005, a pesar de que Eurostat señala que los consumidores fueron "menos optimistas" por lo que respecta a la situación económica general. No cambiaron, sin embargo, sus expectativas sobre la situación financiera y las oportunidades de ahorro en el próximo año.

Por el contrario, mejoraron sus expectativas con respecto al desempleo para los próximos 12 meses, de manera que su confianza creció un punto en la UE y dos en la eurozona en julio.

Eurostat afirma que la estabilidad de la confianza en el nivel agregado refleja generalmente desarrollos estables en la mayoría de los Estados miembros. Señala que Francia vio caer la confianza de sus consumidores en un punto, Italia y Reino Unido no variaron y creció en Alemania (+1), España(+2) y Polonia (+2).

La confianza en el sector minorista se mantuvo "estable a un nivel muy elevado" en la UE y mejoró en un punto en la zona euro, dos ámbitos en los que los componentes de este indicador experimentaron desarrollos diferentes.

Así, en la UE no varió la apreciación de los minoristas sobre la situación empresarial actual pero su análisis de las expectativas fueron más positivos. En la zona euro, estos análisis de los minoristas mejoraron en cuatro puntos. En ambas áreas, sin embargo, los inventarios del volumen de stocks se deterioraron en dos puntos.

Eurostat coloca a España como el país donde más cayó la confianza minorista (-6), seguido de Reino Unido (-3). No varió en Polonia y mejoró en Alemania (+2), Francia (+3) e Italia (+1).

En cuanto a la confianza en el sector de la construcción, ésta "declinó marginalmente" en la UE y la zona euro, después de la amplia estabilidad de la que ha gozado durante la primera mitad del año. Eurostat explica esta disminución particularmente por el empeoramiento de dos factores: la caída de dos puntos de los inventarios de los libros de pedidos y las expectativas de empleo, un punto menor en la UE y estable en la eurozona.

La confianza en el sector de la construcción cayó en España (-1),Francia (-2), Italia (-3) y Reino Unido (-1), mientras que fue "más optimista" en Alemania (+2) y no varió en Polonia.

Finalmente, la confianza en el sector financiero se incrementó levemente en la UE pero cayó en la zona euro, indica Eurostat, que califica este indicador de "errático" durante la primera mitad de 2007.

El incremento en la UE vino del aumento de dos puntos en el análisis sobre la situación empresarial y la caída en la zona euro se debió a un empeoramiento del análisis sobre la evolución pasada y futura de la demanda.