Economía/Macro.- El consenso de los analistas prevé que el BCE mantendrá los tipos de interés en su reunión de mañana

Actualizado: miércoles, 11 abril 2007 19:24

Apuntan a que no será la última subida de tipos del año, aunque creen que no subirán más allá del 4%

MADRID, 11 Abr. (EUROPA PRESS) -

El consenso de los analistas prevé que el Banco Central Europeo (BCE) mantenga los tipos en el 3,75% en la reunión que mantendrá mañana tras la subida de un cuarto de punto porcentual del pasado mes de marzo, que dejó el precio del dinero en su valor más alto desde el primer trimestre de 2001.

Los analistas consultados coinciden en señalar además que el organismo subirá los tipos al menos en otra ocasión a lo largo del año y que en la reunión de mañana y posterior comparecencia de Trichet comenzará a "lanzar mensajes para indicar esta posibilidad", tal y como indica el analista de Caja Madrid Juan Antonio Cabrera, que asegura que hay "una gran expectación" creada en torno a las señales que pueda lanzar el BCE tras su decisión sobre los tipos.

En el entorno actual los expertos prevén que el BCE ejecute una nueva subida de tipos a mediados de año y que los mantenga durante el resto del ejercicio en el 4% "probablemente el nivel máximo que vaya a alcanzarse, aunque con riesgos de nuevas subidas", indicó el departamento de análisis de American Express en un informe. Una opinión en la que coincide el Royal Bank of Scotland, que apuesta por una nueva subida que sitúa en junio.

Según Cabrera, existen riesgos de que el BCE pueda ir más allá del 4%, aunque lo considera podo probable. "Hay que ver el efecto sobre la inflación de la reciente subida del precio del petróleo", advierte, aunque precisa que el BCE tendría que empezar a pensar en detener su política alcista de tipos, entre otros motivos, por la apreciación del tipo de cambio.

El analista Simon Ward, de la firma New Star, se enmarca en la misma tendencia y opina que el BCE detendrá la subida de tipos en el 4%: "Si se diese el caso de que los tipos llegasen al 4%, lo más probable es que se produzca un largo periodo de estabilidad para que los efectos del considerable endurecimiento monetario desde finales de 2005 se dejen sentir en todo el sistema", asegura.

APRECIACIÓN DEL EURO Y CONTENCIÓN DEL EURIBOR

Según afirma Cabrera, la apreciación del euro durante los próximos meses es uno de las factores que tiene que tener en cuenta el BCE para moderar la subida de tipos.

El analista cree que la divisa comunitaria alcanzará en los próximos meses los máximos obtenidos en diciembre de 2004 y se situará en 1,366 dólares, e incluso "puede romper este nivel de resistencia".

Sobre el impacto sobre la economía de la zona euro de la nueva subida de tipos, Cabrera opina que será de carácter moderado, en primer lugar porque ya ha sido descontada por el mercado.

El analista de Caja Madrid también apunta hacia la suavización de los efectos sobre el mercado inmobiliario, debido a que el Euribor ya se encuentra en niveles elevados. De hecho, pronostica que en este nuevo entorno, el Euribor no sobrepasará este año la frontera del 4,30%.

RESISTENCIA EUROPEA A LA RALENTIZACIÓN ESTADOUNIDENSE

Según afirma Cabrera, la economía europea ha sorprendido a los analistas por su fortaleza y su resistencia a la ralentización del crecimiento estadounidense, que prácticamente no tuvo impacto en el entorno económico de la UE.

En cualquier caso, precisa que tarde o temprano esta ralentización afectará a la economía comunitaria por la fuerte influencia de la primera potencia económica mundial.

Cabrera sostiene que la economía norteamericana esta en situación de desaceleración y señala que se encuentra en una "pausa dentro de una fase expansiva". Su crecimiento se va a mantener por debajo de su potencial durante todo el año, en torno al 2,75%.

Respecto a la evolución de los tipos, EEUU tiene una situación más complicada, porque con este escenario de crecimiento debería bajar el precio del dinero, pero tiene una inflación muy elevada.

En todo caso, el analista se muestra optimista y asegura que mientras el consumo sostenga la economía estadounidense, la ralentización de vivienda y la crisis hipotecaria no se trasladará a otros sectores, por lo tanto, no se puede hablar de recesión, aunque, apunta que "los riesgos están ahí".