Economía/Macro.- El crecimiento de la economía española se desacelerará al 3,1% en 2006 y al 2,8% en 2007, según BBVA

Actualizado: martes, 7 marzo 2006 16:04

Considera la dependencia energética, la pérdida de competitividad y el futuro de las pensiones como las principales amenazas

MADRID, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -

El crecimiento de la economía española se desacelerará este año hasta el 3,1% y hasta el 2,8% en 2007, desde el incremento del Producto Interior Bruto (PIB) del 3,4% registrado en 2005, según el estudio de BBVA 'Situación España', que apunta que esta evolución estará relacionada con una moderación del consumo de los hogares y de la actividad en el sector de la construcción.

El estudio, que fue presentado hoy por el director del Servicio de Análisis de BBVA, José Luis Escrivá, apunta que la moderación del crecimiento y la tendencia a la convergencia con las tasas de crecimiento de la economía europea se debe al cambio en la estructura de crecimiento española, que pasará de estar basado en el aumento de la renta disponible por las buenas condiciones financieras a una estructura que aproveche el tirón de la demanda externa.

Escrivá opinó que estos datos no son "malas noticias" porque las economías deben registrar ciclos de cierta desaceleración para conservar su potencial de crecimiento. BBVA apunta que el gasto de los hogares pasará del 4,4% registrado en 2005 al 3,6% en 2006 y al 3,2% en 2007, y considera que este tendencia está relacionada con la subida de los tipos de interés y la desaceleración de los precios de la vivienda.

Según BBVA, los altos niveles de actividad de los últimos años en el mercado de la vivienda no son sostenibles a largo plazo y la producción de viviendas "se acomodará a las condiciones de una demanda sostenida pero sin incrementos relevantes". Sin embargo, la demanda de viviendas se mantendrá, en consonancia con las necesidades de la población y con el aumento de la compra de segundas residencias por parte de extranjeros en zonas turísticas.

No obstante, precisó que existen tres elementos de riesgo de cara al medio plazo que podrían amenazar la evolución de la economía española, que consisten en la fuerte dependencia energética, la pérdida de competitividad frente al exterior y el futuro de las pensiones.

Según apunta el estudio, la ampliación del déficit exterior de la economía española, cuyo valor alcanzó el 7,5% del PIB en 2005, es el resultado del fuerte crecimiento de España, la pérdida de competitividad en lo que se refiere a los precios relativos de los productos españoles y el incremento de los precios de la energía.

IMPORTACIONES MÁS BARATAS.

"Somos un país cada vez más caro", aseguró Escrivá, quien recordó que las importaciones procedentes de la eurozona son un 15% más baratas ahora que en el momento de la creación de la Unión Monetaria. Según el informe, el empeoramiento de la balanza por cuenta corriente puede acabar afectando al empleo y a la actividad.

En lo que se refiere a la dependencia energética, Escrivá resaltó que durante los últimos años España el incremento de la riqueza disponible se ha visto acompañado de un aumento del consumo de energía, mientras que el resto de los países europeos tiende cada vez más a la eficiencia y al ahorro energético.

Si bien el responsable del Servicios de Estudios de BBVA explicó que esta tendencia podría estar relacionada con factores estructurales y económicos, como el hecho de que España es uno de los primeros productores de materiales no minerales usados en el sector de la construcción, cuya fabricación se caracteriza por un alto consumo energético, Escrivá concluye que "España no ha sido capaz de combinar el aumento de la renta disponible con la estabilidad en el consumo de energía".

REFORMAS DEL SISTEMA DE PENSIONES.

La tercera amenaza identificada por BBVA reside en la comprobación de que el gasto en las pensiones contributivas aumentará como consecuencia del incremento de la población que tiene más de 65 años, hasta situarse en el 17,9% del PIB en 2059, si no producen reformas estructurales del sistema de pensiones, como la creación de cuentas individuales.

Además, el banco prevé que en la segunda mitad de la próxima década, hacia 2015, el sistema de pensiones entre en déficit, a pesar del Fondo de Cobertura. Por ello, Escrivá explicó que "debería haber ya algunas medidas sobre la mesa" para conseguir ajustar el sistema de las pensiones para que sea sostenible, y se mostró favorable a la ampliación progresiva de la edad laboral.

Respecto a la situación en la Unión Europea, BBVA se muestra optimista y considera que la economía de la zona euro crecerá un 2% este año y un 2,2% en 2007, gracias a un entorno económico global favorable y a un previsible fortalecimiento del consumo interno alemán, que a su juicio se está recuperando.

OPTIMISTA SOBRE LA RECUPERACIÓN ALEMANA.

En relación con Alemania, aseguró que la demanda interna se está recuperando, en especial, en lo referente a la inversión, y también existen los fundamentos para la mejora del consumo de los hogares, que se verá impulsado por la mejora del mercado laboral. "La confianza de las familias está repuntando significativamente, lo que supone una menor precaución a la hora de gastar", indicó Escrivá.

Sin embargo, el director del Servicio de Estudios se mostró crítico con las últimas declaraciones del Banco Central Europeo (BCE) y consideró que las alarmas de la autoridad monetaria sobre el traslado de los efectos de segunda ronda de la inflación a la economía no están justificadas.