MADRID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de CiU y candidato a la presidencia de la Generalitat, Artur Mas, afirmó hoy que era "difícil hacerlo peor" y ha habido un "alto grado de incompetencia" en todo lo relacionado con la OPA de Gas Natural sobre Endesa, "desde la óptica" del Gobierno de España.
Durante su intervención en el Fórum Europa, recordó que el Gobierno "bendijo" la operación, a pesar de lo cual, después, algo que podía haber terminado como una operación interna dentro de España para "forjar una enorme" empresa energética, puede acabar en una operación que "ya no se hace dentro de España y encima con un Gobierno que ha sido incapaz de defender su propio esquema de trabajo inicial", y que incluso cuando cambia el escenario, "casi brinda con los otros".
Así, retó a los asistentes al desayuno informativo a si alguno podría decir "de verdad" que en el caso concreto del sector energético no se han producido ciertos problemas "simplemente" porque quien "opaba era una empresa catalana". "¿Alguien se atreve a decir que eso no tuvo ninguna influencia?", preguntó.
En su opinión, todo el mundo sabe que eso fue así, y añadió que el hecho de que fuera una empresa catalana quien "opaba" se atribuyó directamente a una operación política liderada por el tripartito. Según dijo, esa fue una de las cosas que en su momento más "palos" significaron para el buen fin de la OPA de Gas Natural sobre Endesa.
Asimismo, Mas consideró "absolutamente extravagante e impropio" que por le hecho de ser una empresa catalana la que dirigía esta operación, en su momento se produjeran los comentarios y los "obstáculos que hubo". Recordó que el ahora candidato del PSC a la Generalitat, José Montilla, entonces era el ministro de Industria y Energía, y abogó por ser "conscientes" de cómo han ido las cosas y no "ahondar en la herida abierta".
En este punto, señaló que si se quiere a Cataluña dentro de España, como así cree él que ocurre, se les tiene que considerar parte del Estado "a todos los efectos", para poder actuar en "igualdad de condiciones". "No por el hecho de que algo tenga origen catalán, tiene que ser puesto bajo un prisma de sospecha permanente", indicó.
Añadió, además, que cuando se ven este tipo de cosas, los catalanes se preguntan si "a lo mejor" es que en España no les quieren de verdad, o acaso les quieren "de otra manera, arrodillados, domesticados", como si fueran "uno más". Así, insistió en que los catalanes son lo que son y no van a renunciar a su personalidad en "ningún ámbito".
Finalmente, quiso resaltar que al lado de las operaciones de este tipo que no acaban de funcionar, hay que tener en cuenta también las que sí lo hacen, y subrayó que, de hecho, hay "algunas que están saliendo bien y otras pueden salir muy bien", si bien no quiso decir a cuales se refería. Eso sí, puntualizó que hay operaciones "importantes" hechas por empresas con sede en Cataluña, "en distintos ámbitos, que están yendo como tienen que ir".
